Ese molesto rollito, conocido mundialmente como "michelín", surge con los años y es muy difícil de eliminar. Y aunque muchos intentan hacer dietas milagrosas, pocos logran bajar esos kilos extras.

Tras el polémico caso de la Clínica Acuario, donde murió una joven de 20 años tras realizarse una abdominoplastía, surgen distintas alternativas para cuidar la figura sin un tratamiento invasivo. Uno de ellos es la Criolipólisis CoolTech.

Maricel Riquelme (44), cosmetóloga esteticista, y paramédico de profesión, es dueña del "Centro de Estética Maricel", que cuenta con este tecnológico sistema. La especialista, con 25 años en el mercado, explicó que "la persona llega, se hace una evaluación, sin costo. Ahí, tengo que medir en milímetros. Ahí, si es que da más de 20 milímetros, se puede hacer el tratamiento. No se puede hacer en personas muy delgadas o más gorditos, es para rollos localizados. También hacemos papadas".

Maricel reveló cómo funciona el servicio: "Es un cabezal, como del porte de una ventosa, lo que entra en el rollo. La grasa se succiona, se congela a -8 durante 70 minutos, se cristaliza, se destruye y se elimina. A los 15 primeros días se ven los primeros resultados, pero los cambios más notorios se ven en dos a tres meses".

Maricel contó que es el único centro de estética que tiene Criolipólisis CoolTech, en Chile.

Tras la muerte de la joven en la Clínica Acuario, aseguró que este tratamiento "no requiere pabellón, aguja o masaje postoperatorio. Incluso, se puede ir a su casa, a la oficina, al gimnasio, a juntarse con amigos. Además, sólo a un 5% de las personas les podría doler, es prácticamente indoloro".