El colegio es el lugar donde los pingüinios pasan la mayor parte de su life. Allí conocen nuevos amigos, amores, le sacan punta al lápiz, la cresta estudiando y, de pasadita, suelen sufrir accidentes por andar paveando en la sala de clases o en el recreo.

El doc Jorge Olivares, traumatólogo infantil de Clínica Vespucio, suelta la dura: es muy importante que el cole cumpla con las necesidades básicas que se requieren en caso de algún chancacazo. Además, para prevenir estos incidentes, es necesario enseñar a los brocacochis a comportarse en el patio, obedecer a los inspectores, profesores y compañeros de curso.

El traumatólogo asegura cruz pa’l cielo que luego de sufrir algún accidente se debe evaluar el estado del chico. ''Hay que verificar si está consciente; si no lo está, se aconseja pedir ayuda. En caso de que sí lo esté, se debe conversar con él y verificar que se comunica bien'', indica el profesional.

Si se trata de un golpe en el mate, la recomendación es no mover al niño. En el caso de tener contusiones o golpes en las extremidades, lo aconsejable es inmovilizarlas con tablillas o cartón, mientras que si tiene heridas, se deben cubrir con un paño o toallas limpias.

¿Cuándo acudir a un servicio de urgencia, ah?

1

Siempre tranquilidad

Si el menor sufrió un golpe fuerte en la pensadora; si luego del pencazo, o hasta 48 horas después de éste, aparecen síntomas como alteración del estado de conciencia, sangramiento en la cabeza u oído, vómitos o dificultad para realizar actividades habituales como en el hablamiento o al caminar.

2

Presionar con una venda

Si el chorro de sangre no se logra detener con la presión de una venda..

3

Secuelas 

Si quedan deformidades dolorosas en las extremidades, con las que el menor no puede apoyar sus pies.