Una semana ha transcurrido desde el funeral del pequeño de Molina Ángel Márquez (4), quien supuestamente fue asesinado por su propia madrastra, y su partida está lejos de ser olvidada.

El niño, que descansa en paz en el Cementerio número 2 de Rancagua, recibe a diario decenas de visitas, pero lo increíble es que de personas que nunca en su vida lo conocieron, pero que ven en él, a un angelito que incluso los puede cuidar desde el cielo.

Así al menos lo confirman trabajadores del recinto y los mismos visitantes que han convertido su tumba en una verdadera animita con un cerro de peluches, globos, flores, cartas, dibujos y mensajes dirigidos al pequeño que de seguro está en el cielo disfrutando todo lo que no tuvo en vida.

Mabel, una vecina del sector, que visita a su fallecido padre todos los días, asegura que “el papá de Ángel ha venido en varias ocasiones, pero el otro día noté algo extraño, buscaba mucho entre las cosas de Ángel, lo vi a la distancia, y movía todo, hasta que encontró un sobre y ya como que ahí quedó tranquilo”.

Por su parte, don Fernando, quien trabaja como guardia en el lugar, contó a La Cuarta que “desde el domingo, en que fue sepultado, son muchas las personas que llegan a preguntar por él, yo les digo que está en el patio número 11 y ellos van. Han preguntado harto por él”.

El compipa no duda en reconocer que la tumba de Angelito es el lugar más visitado del cementerio, ya que además nadie que pase por allí queda indiferente ante tanto regalo.

“Vengo todos los días a ver a mi papá que falleció hace un tiempo y paso a verlo porque su historia me dio mucha pena, lo mismo para mi hija. Ella sufrió mucho con lo que le ocurrió a Ángel”, nos cuenta Mabel.

Ella misma confiesa que “ha oído que algunos ya están pidiendo más de algún favor al pequeño”.

Paralelamente, en Facebook, a través del grupo “Justicia Para Nuestro Angelito Marquez”, se ha iniciado una cadena de oración que se realiza todos los días a las 22.00 horas, con el objetivo de orar por el descanso del niño.