Fernández fue el encargado de entregar el trofeo de América, el que por pedido de la ANFP lucía el bicampeonato logrado por la Roja.
Desde ayer en la tarde dejamos de ser los campeones de América. Por lo mismo, en la ceremonia final de la edición en Brasil había que devolver el trofeo para que el nuevo monarca lo pudiera levantar.
Y el encargado de llevar la copa en el estadio Maracaná fue Matías Fernández, quien fue escogido por los compañeros de la Roja para tamaño honor.
Con la mejor pinta, el volante que suena firme para volver a Colo Colo ingresó a la cancha con el terno recién planchado y bien engominado, llevando el trofeo hasta el escenario en medio de la cancha donde se puso fin al reinado de Chile, que fue el monarca desde el 2015.
El paseo del Mati, además, sirvió para confirmar que se enterró la polémica por la chapa en la Copa, pues por petición de la ANFP en definitiva la Conmebol accedió a la solicitud de instalar la placa de la Copa Centenario ganada en 2016 por la Roja.
"Estamos muy contentos de que la Conmebol haya considerado nuestra solicitud de incorporar la placa conmemorativa de la Copa Centenario 2016 en el trofeo de la histórica Copa América", comentó el presidente Sebastián Moreno, quien se movió en la antesala.
"Lo consideramos un tema de justicia deportiva, ellos lo entendieron de la misma forma cuando elevamos la solicitud y hoy nos sentimos orgullosos de que el nombre de Chile aparezca dos veces en esta hermosa copa", cerró Moreno.