Este domingo el Real Betis, dirigido por Manuel Pellegrini se enfrenta al Atlético de Madrid, y para este encuentro el DT decidió que Claudio Bravo irá en el banquillo de suplentes. Sin embargo, esta suplencia no es solo un golpe a la confianza del arquero nacional, ya que genera inestabilidad en su futuro.

El contrato de Bravo con el Betis termina en junio, pero existía una chance de que fuera renovado automáticamente por un año. Para esto debía cumplir con un límite de partidos durante esta campaña, lo que no podrá ser posible tras la suplencia esta tarde.

Por lo menos, durante 25 partidos, el chileno debía defender la portería de los verdiblancos, los que ya no cumplió, por lo que en los próximos meses tendrá que sentarse a charlar con la dirigencia del club para ver si continúa en España, o hace las maletas.

¿Regresa a Chile?

Tras quedar eliminados de la UEFA Europa League y de la Copa del Rey, el equipo redujo considerablemente el total de encuentros que esperaban disputar. Hasta este domingo Claudio Bravo ha jugado solo 13 partidos, por lo que debía ser titular en los 12 partidos restantes del torneo español.

Pero Manuel Pellegrini consideró que Rui Silva debía ser el guardametas para enfrentar al Atlético y así seguir en la lucha de cupos a copas europeas, cerrándole la opción a Claudio Bravo.

Esto no significa que esté todo perdido para el arquero chileno, ya que aún puede negociar su continuidad en el Betis por algunas temporadas más, o podría ser el primer paro para un retorno del capitán de La Roja a tierras nacionales.