Las peleas en el fútbol chileno no son casos aislados, ya que en más de una oportunidad se han formado grandes mochas en el terreno de juego, pero pocos incidentes han sido tan recordados como la pelea entre Colo Colo y Universidad Católica en las últimas jornadas del Apertura 2007.

Aquel episodio terminó con jugadores y técnicos rindiendo cuentas en el tribunal de disciplina de la ANFP, y dejó postales que son recordadas hasta el día de hoy.

Restando tres partidos para el cierre del campeonato, ese 27 de mayo el Cacique, dirigido por Claudio Borhgi, recibió en el estadio Monumental a los cruzados, quienes eran comandados por el estratega peruano, José Guillermo del Solar.

Tanto el conjunto de la franja como los albos llegaban a este enfrentamiento con 40 puntos, liderando el campeonato, por lo que el ganador del enfrentamiento tomaba ventaja y se ubicaba como el principal candidato a dar la vuelta olímpica.

Un duelo parejo

A pesar de que Colo Colo llegaba como favorito a este partido, considerando que venían de ser subcampeones de Sudamericana, y eran los bicampeones del fútbol chileno, la UC también sumaba credenciales para quedarse con la victoria.

El árbitro Carlos Chandía fue el encargado de impartir justicia en un partido que terminó saliéndose de control.

En cuanto comenzó el enfrentamiento, los locales tomaron posesión del balón y empezaron a apoderarse del partido. Fue solo cuestión de tiempo para que los goles llegaran. Millar abrió el marcador a los 15′ minutos, y el 2-0 lo anotó el “Chupete” Suazo en los 28′.

Para el complemento, los cruzados salieron con más ímpetu y se apoderaron del ataque, generando peligro constante en la portería de los albos. Fue así como llegó el descuento gracias a una gran definición de “Bichi” Fuertes”, quien a los 66′ le revivió la ilusión a su equipo.

Más que un partido, se estaba jugando el campeonato en la cancha, por lo que Universidad Católica continuó presionado, poniendo entre las cuerdas al Cacique por momentos. Un cabezazo de Gutiérrez pegó en el travesaño, y cerca del final Luis Mena sacó una pelota de la línea, para mantener la ventaja.

Chandía terminó el partido, y el capitán de Colo Colo, Arturo Sanhueza corrió con los brazos en alto hacia el círculo, aprovechando esos instantes para chicanear a sus rivales, con quien protagonizó varios encontronazos durante el desarrollo del duelo.

Las provocaciones terminaron en una batalla campal en medio de la cancha, donde el más descontrolado era el volante cruzado Luis Núñez, quien intentó durante varios minutos encarar a Sanhueza, pero el centrocampista albo fue mandado a camarines de inmediato.

En medio de la tole tole, otra figura se trenzó en una pelea: Claudio Borghi. El Bichi se metió al tumulto para separar a sus pupilos, pero su misión se vio interrumpida por el preparador físico de la UC, Alejandro Richino, con quien se fue a los combos.

Y es que el PF cruzado lanzó un cabezazo al estratega, quien terminó con sangrado nasal, pero lejos de quedarse rezagado, respondió con un golpe que fue hasta forografiado.

Una vez que todos abandonaron la cancha los problemas siguieron. Núñez quería encarar al capitán colocolino, a quien incluso amenazó de muerte. El jugador de la UC tuvo que ser retenido por Rodrigo Meléndez y el preparador físico Hernán Torres.

“Te juro que si lo pillo en la calle, lo mato”, comentaba Lucho Núñez, visiblemente molesto y frustrado.

Coletazos

En conversación con la prensa, el jugador cruzado señaló: “No me arrepiento de lo que pasó. Sanhueza supuestamente es un jugador guapo. De guapo no tiene nada, porque en la cancha se ven los guapos. No se ven diciéndote cosas. Estoy molesto con él, sigo de la misma manera que estaba dentro de la cancha”.

“Me dijo que éramos una cagones, que nos habían ganado. ¿Cagones? ¿De qué manera? Estuvimos cuarenta y cinco minutos metidos en su arco. De cagones no tenemos nada”, agregó Núñez.

Una vez intervino la ANFP, al “Bichi” lo sancionaron con cuatro fechas de suspensión, pero lejos de arrepentirse lanzó una frase para el oro: “No permito que nadie me venga a insultarme y menos un pingüino”.

Mientras que por otro lado, el DT de Católica, José Guillermo del Solar, fue castigado con dos jornadas. Así mismo, a Luis Núñez y el preparador físico Richino, fueron sancionados con dos fechas.

Finalizado el campeonato, Colo Colo se quedó con el título por tercera campaña consecutiva, y los cruzados quedaron en el segundo puesto, con solo un punto de diferencia de los albos.

Recientemente, Claudio Borghi recordó este accidentado partido en el podcast “A Veces Hablamos de Fútbol”, donde comentó que esa pelea significó su primera expulsión como entrenador. “Lucho Núñez se peleó con Sanhueza, entonces yo me meto y le digo al profe (del Solar), agarra tus jugadores. Y me dice, agárralos vos, y ahí me calenté”, recordó entre risas el Bichi.

“Pegué, yo soy de población, tiré un gancho. Fue la única vez que me expulsaron como entrenador, bueno, después en la selección me expulsaron pero no fue culpa mía”, cerró el Bichi.