Durante muchos años, el doctor René Orozco, otrora mandamás de Universidad de Chile, criticó todo el movimiento que significó la quiebra de la Corfuch el 2006, el ingreso del síndico de quiebras, José Manuel Edwards, y la posterior entrega de la concesión del club a Azul Azul.

Como el nefrólogo ya tiene 88 años, está jubilado, con algunos problemas de salud y movilidad. Sin embargo, eso no quita que en variadas ocasiones disparara contra las "injusticias" y que pregonara que más temprano que tarde llegará el día en que todo volverá a la normalidad.

Y esa jornada llegó la quincena de septiembre, cuando los tribunales declararon el sobreseimiento de la quiebra, la cual fue apelada por la Tesorería General de la República, y por consiguiente la Corporación de Fútbol Profesional de la Universidad de Chile dejó de presentar deudas y está lista para comenzar su resurrección.

Es más, si todo va según el deseo de Orozco, la Corfuch sería un actor presente en el día a día de la "U", "sobre todo en el sentido social y las actividades ligadas a la casa de estudios más prestigiosa de este país". Aunque lo más importante para los viejos estandartes es que podrían quitarle la renovación automática de 15 años más de la concesión a "AA" y esta terminaría el 2037.

Aunque lo más increíble es que en este proceso judicial se estableció que Lino Díaz "nunca fue elegido" y, por lo tanto, el polémico doctor volverá a ser presidente de la Corfuch, tal como lo hizo entre 1991 y 2004.

Con esa notivia, Orozco hizo un alto en un paseo familiar por Villarica y se sinceró con La Cuarta. Y como es su costumbre no dejó títere con cabeza.

"Estoy contento, porque estamos dando pasos importantes. Hace rato estamos peleando, porque la 'U' fue mal declarada en quiebra y desde ahí le han robado el patrimonio. Éramos parte del fisco y de la Universidad de Chile. Por eso no podíamos estar en quiebra. Bueno, al menos ahora, la justicia actuó y poco a poco van a ir saliendo los trapos al sol. Esos mismos que dije en su momento y me trataron de loco", afirmó el ex dirigente.

-¿Cómo tomó la noticia que vía judicial usted volvería a ser presidente de la Corfuch? ¿Es algo importante o solo un saludo a la bandera?

Esto me da fuerzas antes que termine mi vida. Y terminar las cosas que tengo que hacer. Voy a dar la pelea hasta el final.

- ¿Cuál sería su objetivo si llega a asumir el papel de lider?

Me gustaría que volviéramos a ser una corporacion sin fines de lucro, parte de la Universidad de Chile. La más importante del país. Yo estudié, viví y fui presidente. Hicimos las cosas que muchos no fueron capaces de hacer. Se reían porque la Ciudad Azul estaba lejos y solo teníamos agua. Pero hoy en día valdría millones y con la autopista estaría cerca. Es inentendible que el síndico José Manuel Edwards lo haya vendido a 400 millones cuando valía 2.500. Perdimos mucho patrimonio.

- ¿Qué es lo que más extraña del fútbol?

El sentido social. Es una actividad deportiva destinada a mejorar a quienes lo practican y quienes lo ven. Ahora estas sociedades anónimas no están ganando ni siquiera tanta plata como creían y querían. Mataron el fútbol y fracasaron. Con suerte ganan algo cuando venden al extranjero a cabros que con suerte le pegan a la pelota. No le achuntaron ni a Estadio Seguro, que de paso bauticé como Fracaso Seguro.

- ¿Cómo ve el presente y futuro próximo de Universidad de Chile?

La "U" está peor que Heller, no tiene jugadores. No logra buenos triunfos. De repente, ganan uno que otro partido. Pero no veo una institución que vaya a ninguna parte. Nosotros teníamos un plan más integral porque el fútbol no es negocio, sino una actividad social.