Erick Pulgar ya lo había adelantado hace un par de semanas. "Es el momento de dar el salto", dijo antes de volver a Italia. Y aunque Bologna se negaba a dejarlo partir, los contratos se respetan.

Es que Fiorentina se comprometió a cancelar la cláusula de salida y tendrá por cuatro temporadas, al menos, a uno de los mediocampistas más solicitados de este mercado italiano.

La directiva del equipo boloñés no quería vender al volante chileno. Es más, la idea de la secretaría técnica era concertar una nueva reunión para extender el vínculo con el jugador y subir el precio de su cláusula de salida.

Sin embargo, en la "Fiore" se adelantaron a la jugada y comprometieron los 13,5 millones de dólares (12 millones de euros) en los que estaba fijada su rescisión. Y, de esa manera, entregarle al técnico Vincenzo Montella uno de sus principales objetivos de mercado.

Así confirmaron a La Cuarta desde la capital de Toscana, la nueva casa del seleccionado antofagastino. El jugador debiera llegar hoy a la ciudad cuna del Renacimiento, donde firmará un contrato por cuatro temporadas con la squadra viola que tiene altas pretensiones en la próxima Serie A, luego de que el club fuera adquirido por el empresario calabrés Rocco Comisso, en junio pasado, a cambio de 190 millones de dólares.

Suficiente para que la sociedad toscana comprometa con el chileno Pulgar un salario anual cercano a los 1,3 millones de dólares.