Chase Hilgenbrinck, la rompió en Naval y Huachipato, pero fue en Ñublense donde alcanzó su logro más importante: volver con la "longaniza mecánica" a la primera división en la temporada 2006. Pese a esté gozo en el alma, "El Gringo" decidió dar un giro radical en su carrera y cambió los chuteadores por la sotana.

Es así, como en el año 2014 decidió seguir el camino del Señor para convertirse en sacerdote. "Después de ganar el campeonato y subir a primera división con Ñublense, me di cuenta que algo faltaba en mi corazón", aseguró.

Las bendiciones del "Gringo"

Frente a la crisis sanitaria que se vive en la ciudad de la Región de Ñuble, el otrora jugador de los "Diablos Rojos", envió sus bendiciones para sus habitantes y de pasadita, a todo el país. "Hay algo en Chillán que no he experimentado en otro lado. Es la fuerza de la gente, la fuerza del corazón. La fuerza de la unión, que no es algo físico, si no algo del corazón", señaló el curita en un mensaje enviado a las redes sociales del club chillanejo.

"Sigan con la misma fuerza. Voy a estar con ustedes. Les mando mi bendición de sanidad y de santidad. Le pido a Dios que bendiga a ese pueblo y a Ñublense. ¡Qué viva Chillán! ¡Y qué viva Ñublense!", cerró Hilgenbrinck.

https://twitter.com/nublenseSADP/status/1245863984940511233