La gran revancha de Rubio

El delantero de Everton fue despedido de Colo Colo en 2008. Una década después se convirtió en la peor pesadilla de los albos.

Nada ha sido fácil en la carrera de Patricio Rubio. A sus 29 años, el delantero de Everton las ha pasado todas. Desde transferencias millonarias a la molestia de los barras bravas. Experiencias que lo han hecho madurar mucho antes que el resto y que hoy lo tienen como el principal argumento para evitar un nuevo descenso ruletero.

Pero con Colo Colo tiene una historia especial. Al margen de los cuatro tantos que le marcó ayer a los albos, el "Pato" nació futbolísticamente en ese club y siempre ha sido teñido con esos colores a lo largo de su trayectoria en el fútbol.

El santiaguino llegó a los 7 años al Cacique y recién pudo debutar en 2008 en el primer equipo jugando como volante por la derecha. Sin embargo, sólo actuó 26 minutos y el técnico en ese entonces, Marcelo Barticciotto, lo dejó libre.

En 2009, con el pase en su poder parte al Club Rivadavia de la tercera categoría argentina, pero un año más tarde volvió a Chile para jugar con Iberia en la Tercera A de ese entonces.

Pero fue en Barnechea donde realizó las campañas que lo vieron renacer. Gracias a sus conquistas el club ascendió a la Primera B en 2011 y luego de otra temporada, fue Unión Española la que se fijó en el jugador que explotó a los 24 años.

Entre 2012 y 2013 anotó 23 tantos con los hispanos. Acaparó tantas miradas que Colo Colo se fijó otra vez en este "hijo pródigo", en agosto de ese año. Pero Rubio se la volvió a hacer a los albos; los dejó con la mano extendida luego de que la U pagara 1,6 millones de dólares por la mitad del pase, lo que provocó el enojo de Blanco y Negro.

Rubio nunca pudo sacudirse de su estigma blanco y así se lo hizo saber la barrar de los universitarios, que en noviembre de 2013 rayó el condominio donde vivía el jugador, después de dejar una amenaza solapada que obligó a un cambio de domicilio.

México y regreso

En el verano de 2015 Querétaro pagó 5 millones de dólares por su pase, una de las transferencias más altas realizadas en la administración de Azul Azul. Aunque en el fútbol "azteca" nunca pudo demostrar el dinero que pagaron los "Gallos Blancos". Después de un semestre volvió a vestir de azul, pero sin el brillo de su primera etapa.

Vuelve a los Dorados de Sinaloa en México, mas sin descollar. El año pasado el equipo "azteca" decide prestarlo al Grupo Pachuca y termina jugando en Everton, donde suma su segunda temporada.

Siempre con Colo Colo entre ceja y ceja. Al mismo equipo que ayer mató con sus mejores argumentos, los goles, para lograr una justa revancha.

COMPARTIR NOTA