“Uno se ilusiona con el golf, con el tenis también, con nuestros representantes que les ha ido tan bien el último tiempo y que nos encantaría verlos ahí en la lucha, ojalá por alguna medalla”. Eso le decía el viernes al diario pop Manuela Urroz, capitana de las Diablas, unas horas antes de que iniciaran formalmente los Juegos Olímpicos. Con la misma esperanza que todos, apostaba por que Alejandro Tabilo o Nicolás Jarry, ambos en el top veinticinco de los mejores del mundo, fueran capaces de acercarse a la gesta histórica que hace dos décadas edificaron Nicolás Massú y Fernando González.

Pero en una jornada dominical que será recordada acaso entre las más tristes del tenis nacional, ambos se despidieron en primera ronda (Tomás Barrios tampoco pudo ante Francisco Cerúndolo) y ahora sólo queda esperar por el dobles.

“Es una tremenda experiencia estar acá, en unos Juegos Olímpicos…, y perder en primera ronda, no estar bien, es duro”, lamentó Jarry por su derrota ante Alexei Popyrin, aunque enseguida se prometió salir “más fuerte de esta”.

El asunto, sin embargo, es lo que Nico subrayó en medio del media culpa, ese “no estar bien”, que un minuto después explicó en detalle y pone en serias dudas lo que pueda hacer cuando enfrenten junto a Tabilo a Luciano Darderi y Lorenzo Musetti: “No se ve la pelota, me desbalanceo en los contraataques. Veo más rápido la pelota y no logro enfocarla bien”.

Es más, aseguró que “el oído está —apenas— en un 55% en sus funciones”.

De todos modos, la primera raqueta nacional anticipó que debería estar al ciento por cien en corto y que espera lavar las heridas en su próxima presentación. A propósito, Jarry y Tabilo debutarán en el dobles este lunes, no antes de las 10.00 horas. Encuentro que será transmitido por Chilevisión y Claro Sports.