La vida de todo boxeador es compleja en sus inicios, y es que las bolsas de dinero a lo Floyd Mayweather solo llegan después de años de grandes sacrificios. Así como también ha luchado el boxeador nacional José Sánchez.

En 2011 estuvo a punto de partir a Norteamérica para seguir con su prometedora carrera, sin embargo, un asalto a días de viajar le dio un giro total a su vida. Pero mañana, después de mucho tiempo, tendrá su revancha en el Club México.

"Pato Lucas", como le puso su entrenador por inquieto y bueno para la conversa, se enfrentará al púgil argentino Javier Clavero, donde peleará por el cinturón ligero latino de la World Boxing Organization.

A lo Rocky

- Estuvo retirado un tiempo, ¿por qué?

-En diciembre de 2011 me iba a ir a Las Vegas y a diez días de irme me asaltaron y me pusieron 4 puñaladas. Estuve dos semanas en la UTI y entré en una depresión bien grande. Me desordené, pesaba 50 kilos y llegué a pesar 85, me metí en cosas que no debí haberme metido, muy malas amistades y dentro de eso hubo droga, alcohol y perdí a mi familia, me dejó mi señora y mis hijos se fueron de mi lado.

- Ahora tendrá su revancha, ¿cómo está con eso?

-Este título me motiva mucho, mi hija está muy emocionada también y me acompaña a los entrenamientos. Tengo una motivación bien grande que es mi mamá que falleció hace 21 años, mis hijos y hace poco falleció mi suegra, por quien tenía un cariño enorme. Y también por don Daniel Morales, mi suegro, que me apoya cien por ciento pues trabajo en su barraca. Ahí levanto palos como loco, lo que me ayuda para el entrenamiento y así mejorar mi físico.

- ¿Cómo ve su pelea contra Clavero?

-Lo he estudiado mucho. Es un boxeador duro, quizás no lo noquee, pero me he preparado mucho. Hice muy buenos sparring: Oscar Bravo, Junior Cruzat y Ramón Mascareña me ayudaron para llegar a tope y bastante fuerte a la pelea.

- Se le ve decidido.

-No me arrugo ante nadie. Le he ganado a la muerte dos o tres veces, a alguien con dos manos arriba del ring no le voy a tener miedo.