Las razones para el castigo histórico a los garreros

Los tres desordenados que colgaron el lienzo contra Johnny Herrera y tiraron bengalas fueron identificadas por sus tatuajes y cicatrices, por lo que estarán más de 11 años sin poder ir a un estadio.

El Superclásico se sigue jugando. Pero ahora la figura del partido fue el laboratorio del departamento OS13 de carabineros y Estadio Seguro se disfrazó de árbitro para mostrarle la tarjeta roja a tres integrantes de la Garra Blanca.

Es que nadie sabía que los hombres de verde llegaron al derby del fútbol chileno, armados con cámaras capaces de grabar en HD hasta las semillas que tiene la ruda que dejó plantada Pablo Guede. Y fueron estos instrumentos los que captaron a los tres hinchas que se subieron al vidrio del sector Árica, para colgar un lienzo que pretendía amedrentar al portero azul Johnny Herrera y lanzar bengalas a la cancha.

"Nosotros fuimos a fiscalizar que se cumpliera con la ley y detectamos algunas inconductas que fueron informadas a Estadio Seguro", explicó el teniente coronel, Juan Urrejola.

Luego el integrante del Departamento de Eventos Masivos y Fútbol de los muchachos que ahora te invitan un café, agregó que "usando nuestras cámaras de alta resolución e identificando características personales, tales como las facciones de la cara, tatuajes y cicatrices pudimos identificar a los responsables y poner estos antecedentes en manos de la autoridad".

Y los muchachos que fueron identificados con las iniciales E.J.C.C, E.A.C.C y B.A.O.V recibieron una sanción histórica: estarán 11 años y seis meses sin poder ingresar a un recinto deportivo del país.

Según explican en el Ministerio del Interior y Seguridad Pública se llegó a esta larga condena porque los barristas rompen una serie de reglas que rigen en todos los partidos. Si desmenuzamos estos castigos quedan así: recibieron tres años por porte de fuegos artificiales, un año por trepar el vidrio, seis meses por portar el lienzo, un año por incitar a la violencia, tres años por desórdenes públicos y por lanzar fuegos artificiales a la cancha se le dieron tres años más.

"Esperamos que siente un precedente para que las personas no cometan estas faltas en otros estadios de Chile", dijo Urrejola. Y en Blanco y Negro recibieron con agrado la noticia, reiterando el compromiso para que los hechos se aclaren, por lo que entregaron sus propias imágenes a la policía.

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