El volante y la dirigencia limaron asperezas para que vuelva a poner la camiseta blanca. El nuevo contrato del "Mago" deberá ser inscrito hoy, antes de las 18 horas, plazo fatal para los nuevos refuerzos.
Colo Colo y Jorge Valdivia firmaron la paz. El volante y la dirigencia del club dejaron sus diferencias de lado en pos de un objetivo: salvar a los albos del descenso. Durante la tarde de ayer, el jugador llegó a acuerdo con la institución que lo formó y sólo falta la formalidad de la firma. El equipo que dirige Aníbal Mosa tiene hasta las seis de la tarde para inscribir el nuevo contrato del "venezolano".
Después de la derrota del miércoles, ante Curicó Unido, la secretaría técnica de los albos se metió de cabeza a la lograr sumar al menos un refuerzo para evitar el descenso. El equipo está último y tampoco tiene dinero para buscar una solución rápida a su comprometido momento.
En ese escenario, el nombre del "Mago" reunía los requisitos necesarios para ser inscrito antes de que el plazo expire. Es chileno, tiene disponibilidad inmediata y cuenta con un finiquito con fecha anterior al 19 de noviembre.
Hace tres semanas, el propio Gustavo Quinteros había descartado la opción del regreso del "Mago". Sin embargo, la imperiosa necesidad de contar con otro jugador en la creación hizo cambiar de idea al cuerpo técnico.
Sin embargo, fueron varios los escollos que se saltaron para lograr el retorno del volante, quien partió del club hace menos de un año. El principal, su traumática relación con los actuales dirigentes, luego de sostener peleas virtuales con el gerente Alejandro de Paul y con Harold Mayne-Nicholls, actual asesor de la inmobiliaria del Cacique.
Asimismo, la demanda que realizó el futbolista a la institución, por más de 300 millones de pesos, fue otro de los elementos analizados por Colo Colo, querella que pasó a segundo plano para lograr el acuerdo.
Y es que ni siquiera el secretario técnico Marcelo Espina se había escapado a la ácida crítica de Valdivia, aunque en esta pasada fue uno de los principales ideólogos del mentado retorno del talentoso.
La necesidad por Valdivia
Tomando en cuenta todos estos problemas, el presidente Aníbal Mosa no estaba del todo seguro de que fuera una buena idea que el "10" volviera. Sin embargo, la necesidad urgente de darle un aire al equipo lo hizo cambiar de opinión. Es más, el papel del timonel fue clave, como "mediador" para recomponer las relaciones, sobre todo tras las insistentes requerimientos del resto del camarín, especialmente de Esteban Paredes.
En principio, el jugador regresa al equipo de Pedrero por esta temporada, incluida la Copa Chile, con opciones de extender por un año más, en caso de que ambas partes estén de acuerdo. Un contrato con incentivos por presencias y minutos jugados.