Le falta un añito para graduarse de "Educadora de Párvulos", pero muchos jotes ya le dicen "Tía" y algunos babosos sueñan con tenerla de espaldas al pizarrón.

Es que la modelo Alejandra Díaz despierta toda clase de sensaciones, más aún cuando decide ponerse su cotona de párvula y luego sacársela para mostrar su traje de conejita con el cual se lució en la tapa de la revista Playboy argentina.

La maniquí llenó de orgullo a los panelistas del espacio pelotero "¿Cuánto Vale el Show?", quienes con el colmillo afilado y el chope inflado decidieron festejar su consagración como sexy conejita y le armaron un carretón de miedo en el taquillero Club Diosas del Barrio Bellavista.

ESTUDIOSA

Por su mánager Rodrigo Mena nos enteramos que la pechochura quiere seguir ligada a los estudios y ya planifica continuar sicología una vez que termine educación de párvulos.

Pero aparte de ser rica por donde se la mire y dedicada a sus estudios, la buenamoza chiquilla de 24 abriles, ojos verdes y pelo rubio esta decidida a convertirse en una de las mejores modelo del terruño. "Lo del modelaje siempre fue una forma de juntar dinero para mis estudios, pero de a poco he ido progresando y ganándome un lugar a punta de esfuerzo", nos sopló la ricura.

- ¿Y si te piden un desnudo?

- No es lo mío, no funciona conmigo, porque siempre la idea ha sido insinuar y no caer en el desnudo fácil, la proyección como modelo me acomoda más.

- ¿Ni por varias lucas?

- Nones.

- A todo esto, ¿el traje de parvularia que luce en la foteli es suyo?

- El mismo que uso en mis prácticas.

- ¿Algún pergenio se le ha subido por el chorro?

- Son tiernos y vergonzosos, pero como niños no son irrespetuosos, además que yo impongo el orden y la seriedad.

- ¿Y los niños más grandotes?

- Aaahhhh, esos son más frescos, pero hay que saberlos tratar para que no se pasen de la raya, ja, ja, ja.

- Yo no me aguantaría teniéndola cerca, mijita.

- Hay que saber poner los límites.

CHOLITA

Pese a la extensa lista de pretendientes que le cuelgan y los cientos de jotes que la siguen como orates, Ale permanece solitaria porque apenas le queda tiempo para ver a sus papis. O sea, no le alcanza para empezar una relación seria.

- ¿Absolutamente sola?

- Siempre hay algo por ahí, pero por ahora sin compromisos.

- Le falta enamorarse.

- Aún no me ha tocado, pero este año podría darse, ¿Quién sabe?

Hugo Pérez Labraña