Fueron nueve semanas recorriendo Chile desde Punta Arenas a Arica, las que se mandó el realizador y actor Felipe Orellana, cerebro y protagonista de la serie ''Diarios de Tricicleta'', que debutará en marzo por TVN.

El tremendo viajecito no fue a pata ni enteramente en la comodidad de un vehículo. Lo hizo en un vehículo adaptado para pedalear con las manos, porque desde los 16 años, cuando cayó de piquero a un bloque de cemento en un río, que Felipe es tetrapléjico, pero eso no le ha impedido hacer muchas más cosas de las que hacen personas de a pie.

''Es un viaje como cualquier otro, vamos a conocer personajes, pero vamos a ir revelando cómo la gente se enfrenta a mí o cómo yo me enfrento a los desafíos, pero desde mi perspectiva de la discapacidad, como cualquier otro ser humano. Es un experimento social también'', tira el productor, quien en la conversa con Esp está en pleno desplazamiento por el Parque Forestal hacia Avenida Matta.

- Pero hay algo más, ¿nox?x

- Es un programa que no solo interpela a la sociedad, sino que a las personas con discapacidad. No se enseña a enfrentar esto, se siente que te pasó algo y ya, chao, saliste del sistema, pa' la casa.

El viaje de Felipe por Chile no fue lleno de cuidados. ''Las locuras que hice no sé si fueron tan de riesgo, porque me gusta mucho la adrenalina'', explica, haciendo un alto en la calurosa y transitada Avenida Matta. De hecho, en su foto de Whatsapp se lo ve enfrentando el precipicio en la Piedra del Coyote, en San Pedro de Atacama.

- ¿Cómo llegaste ahíx?x

- Siempre están la forma y la manera de hacer las cosas. Y me empujaron hasta arriba unos amigos, porque también hay que saber pedir ayuda, sin miedo ni temor, sin vergüenza. Pidiendo ayuda he hecho todo lo que he hecho.

- ¿Es replantearse la discapacidadx?x

- La ONU dice que la discapacidad no tiene que ver con el respeto, sino con las posibilidades que la gente y la sociedad te da. Se hace manifiesta cuando surge una barrera de actitud o estructural que no puedo pasar. Si esas barreras no existen, no existe la discapacidad, como en España, donde estudié. Allá no era especial, era un tipo como todos, donde las ciudades estaban adecuadas a uno.

- ¿Cuál fue el momento más emotivo de tu viajex?x

- El retorno al lugar de mi accidente, en un río, en Curarrehue, al interior de Temuco. Ahí se fue a vivir Claudio, el amigo que estuvo a mi lado al momento de mi accidente. Pude recordar mi historia y comprobar que yo no me había inventado, lo que me pasó por una cuestión emocional. Eso se verá en el tercer capítulo.

- ¿Qué esperas del público de Diarios de Tricicletax?x

- Que abran su conciencia, que no se sitúen frente a una discapacidad llorona, penosa.

Son las palabras de Felipe, quien con orgullo dice que ''somos 3 millones de personas con discapacidad en Chile,  somos un tremendo mercado laboral y, si quisiéramos, una tremenda fuerza política que podría incluso poner nuestro Presidente''.