Como un macho herido quedó el pobre Félix en Los 80. En el capítulo que se emitiría anoche, el más pequeño de la familia Herrera se animó a pedirle pololeo a su vecina, la Camilita... Aunque con tan mala técnica, que la cabra chica le entubó su oferta amorosa.

"¿Querí pololear conmigo?... Me gusta tu pelo, como te ríes, te quiero mucho Camila", le dijo el peque a la niñita que lo tiene loco desde que llegó al barrio. Y para la petición el broca se preparó, ah: vistió su mejor polerón con cierre y hasta le pidió las llaves del furgón a su papá, como para estar más cómodo con su doncella.

Habló parejito y demás que se echó su flor de espino, pero la pequeña debilidad ni se arrugó para matarle la ilusión de besuquearla. Más encima, junto con decirle que nones al pololeo, le salió con la vieja excusa de que mejor fueran amiguitos nomás.

"Te quiero como amigo, pero si nos ponemos a pololear vamos a perder la amistad", se excusó antes de dejar botella al yunta de Brunito.

La respuesta seca y directa dejó turulato al pequeño galán, quien terminó llorando a morir tumbado en su camita.

Karina Santoro, la mini actriz de 14 años que interpreta al frustrado amor del hermano de Claudia, recuerda que la escena donde le piden pololeo fue muy graciosa y ambos estaban medio nerviosones. "Lucas (Félix) igual se puso nervioso, y yo también lo estaba porque me acordé de algunas veces que me pasó algo parecido, de cuando me pidieron pololeo...", cuenta ella.

- ¿Y cuántas veces te han pedido pololeo?

- Varias, y he pololeado tres veces, ahora no estoy pololeando eso sí.

- Harto para ser tan chiquituri...

- Sí, es que soy un poco insegura para las relaciones, a veces prefiero tener más amigos.

En todo caso, Félix no tiene todo perdido en la ficción. En el próximo episodio la chicuela le dirá que pensó más la cuestión y le dará una esperanza.

Otro que también la pasó como el forro fue Martín. El pailón le contó a sus padres que con su minoca, la punketa Paola, están esperando guagua. Juan Herrera lo subió y bajó por "embarrarla tanto" y "meter la pata a fondo". Ana, su mami ya le dijo que por ropa, ni cuna para su retoño en camino no se urgiera, porque tenía un stock de pañales de emergencia.