Si la imagen de Paul Vásquez se empañó con la aparición de un retoño de 4 años al que el humorista dijo que "no siento como hijo", la declaración de Amanda, una de sus cinco chancletitas "reconocidas", lo dejó con el barro hasta el cogote.

La chiquilina, de tiernos 12 años, entre lágrimas contó por la tele que el "Flaco" hace 5 años que no la iba a ver a Rancagua.

Historia tras historia que mi tío ha enfrentado  asumiendo sin trapicarse  su poca pesca a ambos pitufos. En esta parada, Paul ha recibido todito el apoyo de su esposa, la nueva titulada en opinología, Carolina Orellana, y también el de su hija mayor, Marilyn.

La lola tiene 19 pepas, estudia teatro en Valpo y tuvo un fugaz acercamiento a la fama en el difunto reality del miedo de TVN, donde fue la primera eliminada.

DEFENSA

En breve cháchara con el diario pop,  Marilyn nos dejó clarito que para ella su papi es del guan y, por lo mismo, le prestaba el ropero completito.

"Siempre voy a estar al lado de mi papá y lo voy a apoyar, obvio", expresó la rucia, imagen y semejanza del larguirucho.

Lejos de armar un clima adverso, la polémica de los hijos perdidos, aseguró, les acortó las distancias: "Esto nos ha servido para unirnos demasiado como familia".

Carolina Ruiz M.