Adriano Castillo, el actor gurú de los chicha fresca gracias a su mítico personaje del "Compadre Moncho", volvió a la nueva temporada de Los Venegas y con hartas novedades.

"Como el compadre siempre ganó poco, cachó que tenía que estudiar. Hizo los cinco años de periodismo en dos y ahora trabaja en un diario comunal, pero siempre pensando en llegar a diarios grandes como La Cuarta", señaló el copiloto eterno del dolape Guillermo Venegas.

- O sea, que está pintado para ser colega del copucheo.

- El destino del Moncho es ser periodista farandulero, no hay vuelta. Va a terminar en un programa de televisión, si se la lleva en pubs, bares y discos, poh.

PARELÉ AL WEB

Con los años Castillo se ha vuelto un ícono pop de grandes y chicos fiesteros, que incluso, creen que puede superar al Canitrot del Jappening a la hora de elegir al master del trasnoche. De todas formas, el actor recomienda a sus fans pasto seco que tengan ojo con los años.

- ¿Alguna vez el compadre le pondrá freno de mano al mambo?

- Perfectamente se puede chantar, quizás hasta por ahí. Porque si un día le da un pre infarto ahí va a recapacitar. Todos los jaraneros que se pegan guaracazos recapacitan.

- Suena a experiencia propia, sénsei.

- Yo era carretero con tutti, hasta más o menos los 55 años. Y recomiendo a mis seguidores que a esa edad se peguen una chantá, aunque sea un poco, y empiecen a seleccionar los carretes.

- ¿Los años pasan factura?

- Es que ya no se puede ir a todas. Después de los 55 el cuerpo se empieza a marchitar.

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