Por estos días, los despachos en vivo desde Brasil se toman gran parte de la pauta de los matinales de televisión. Entrevista a los hinchas de la marea Roja, joteos a las bellezas brasucas y subir al columpio a los argentinos son parte de la rutina diaria de los ágiles de la prensa que se ganan los porotos en Brasil 2014.

Sin embargo, esta mañana el periodista de Bienvenidos, Max Collao sufrió el peor bochorno de su corta carrera tevita. Al hombrón le pidieron lanzarse a las agua de Copacabana y cómo el compadre es obediente hizo caso y se pegó el guatazo de su vida.

Lo malo es que al salir de las aguas, el pantalón le jugó una mala pasada al notero y terminó con su trasero blanco al aire, ante las risas desatadas de sus compañeros de trabajo.