El show de Bad Bunny dejó la vara muy alta en la última noche del Festival. Tanto que el público espero con paciencia seguir una jornada de ensueño con la presentación de Bonco Quinongo.

Y en el comienzo saco varias risas con su simpatía y desplante en el escenario, lo que hacia pensar que el cubano triunfaría en Viña.

Sin embargo poco a poco fue perdiendo el rumbo. Sus vivencias como extranjero no engancharon con los fanáticos que comenzaron a pifiar para apurar su salida.

Tan bajo estuvo su nivel que ni la contagiosa risa de Pancho Saavedra -la que se escuchó a través de la transmisión oficial- alcanzó a darle apoyo para salir adelante.

Ya cuando el monstruo comenzaba a despertar, Martín Cárcamo y María Luisa Godoy aparecieron para salvarlo y darle una despedida decente. Así el humor se evitó un nuevo papelón.