Meses antes de su partida: el día que Camiroaga rechazó millonaria oferta de trabajo en Estados Unidos

El "Halcón" tuvo la posibilidad de "pitutear" en Miami, pero finalmente decidió quedarse en Chile. Estas son las razones.

Corría octubre del año 2010 y Felipe Camiroaga la descosía en la Televisión chilena. Era uno de los rostros más importantes de TVN y la industria en general, tanto así que estaba en el peak de su carrera tras animar el Festival de Viña del Mar.

Por lo mismo, no fue extraño que el "Halcón" recibiera una cotota oferta para irse a trabajar a "Los Estados Unidos de Norteamérica". Univisión quiso que animara un matinal en Miami.

Sin embargo, después de meditarlo con la almohada, el animador la rechazó. "Fue una decisión difícil porque para cualquier chileno es muy atractivo el desafío de irse a trabajar a la TV de Estados Unidos y vivir en Miami. Pero la verdad es que lo pensé mucho y quiero seguir viviendo en Chile y trabajando en TVN, porque este es mi país y este es mi canal, donde me siento feliz y donde puedo seguir aportando", dijo en ese momento a través de un comunicado que emitió el "canal de todos".

Y ahora, a 10 años de su partida y 11 de decirle "nones" a los gringos, salen a la luz algunos pormenores de esa decisión.

Daniel Sagüés, amigo cercano y director de televisión de varios de sus programas, cuenta los motivos que lo llevaron a quedarse.

"En algún minuto le ofrecieron irse a EEUU, a Miami, le ofrecieron un buen contrato, programa, internacionalizarse. Y estuvo apunto. Incluso en algún minuto me dijo 'si yo me voy, nos vamos juntos, armamos algo allá'", reveló en diálogo con La Cuarta.

Luego, contó cuáles fueron los motivos que le dio para no moverse del país.

"Después se me acercó y me dijo 'no me voy a ir. Yo llego aquí al canal y tengo mi estacionamiento, mis amigos. Y tengo mi programa. Conozco a la gente del casino, y la persona que me le lava el auto. Me voy a mi casa y tengo mis caballos, mi cama, mi patio, mis animales, mis cerros. No tengo nada que ir a hacer otro lado. Estoy súper bien acá, tengo pocos amigos y no quiero tener más. Con lo que tengo soy un hue… súper feliz. No quiero nada más. Pa' qué me voy a ir a Miami a estar con gente que no conozco, con otra mentalidades, otra idiosincrasia, otros intereses. Irme de vacaciones puede ser, disfrutar de las playas, pero mi casita y mis cosas están acá. No tengo nada que ir a hacer afuera'", complementó sobre la reflexión que hizo Camiroaga en ese minuto.

La vida que quería el "Halcón"

Y sobre la misma, también contó algunos gustos que tenía Felipe, los cuales también lo impulsaron a seguir en Chile.

"Una de las cosas que le gustaba era la tranquilidad. Él estaba metido en este mundo de la televisión, que se reía mucho, lo pasaba bien, lo disfrutaba y todo, pero se terminaba el programa y no andaba pendiente ni del rating, ni de dónde terminamos el carrete, ni de la competencia. No. Terminaba, agarraba su auto y se iba al campo. Y si iban algunos amigos nos juntábamos a comernos unos asados, tocar guitarra, andar a caballo, mirar los pajaritos. Ponerse a maestrear y ese tipo de cosas. Para él era muy importante tener una vida plena, tranquila y poder disfrutar de las cosas buenas de la vida", complementó.

"Entre irse a animar un programa a Estados Unidos o irse a vivir a su fundo que se había comprado hace dos meses en Chillán, se queda con el fundo. El campo. Era la vida que a le gustaba",reveló.

Y esa postura también la comparte el Kiwi, otro de sus grandes yuntas en los medios de comunicación.

"Cuando tuvo ese ofrecimiento de irse a EEUU que fue concreto. Era la raja, muchas lucas. Yo le decía hue… ándate para ir a verte. Para que hue… allá (bromea). Y me decía 'para qué me voy a ir. Aquí me va la raja. Me va bien. Vivo bien. Aquí tengo mis amigos, pa qué empezar de nuevo allá si yo no quiero estar allá'. Cualquier animador se hubiera ido. Por lo menos un año, pero él no. 'Yo soy bueno aquí, quizás allá mi humor, no sé. Vivo tranquilo, tengo mis papás. Pa' qué', cuenta sobre lo que le comentó su amigo en ese minuto. "Dijo que no. Hay que hacer esa", recordó.

Especial Diez años sin Felipe Camiroaga

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