Fue en septiembre de este año cuando Jorge Pacheco (65) anunció el cierre de su mítico restaurante "Aquí está Coco", ubicado en pleno corazón de Providencia. Es que la crisis social y la pandemia lo dejaron con números rojos, y antes de quedar peor que el Colo, decidió ponerle fin a su proyecto de 47 calendarios.

De ahí en adelante comenzó el proceso más difícil: vender el terreno, borrar del local los grandes recuerdos de su carrera y decirle adiós al equipo humano que lo ha acompañado fielmente. "A mí la vida me ha pegado con todo: cólera, crisis de los ochenta, terremoto, incendio. Soy cuero de chancho, pero esto me dio muy fuerte, fue difícil, doloroso. En la despedida de mi gente me quebré, lloré con ellos", soltó emocionado Coco a La Cuarta.

- ¿Cómo ha pasado este período, luego de comunicar la noticia? Me entretengo con el reciclaje, para no peinar la muñeca. Estamos liquidando muchas cosas, eso me sirve para parar la olla. Las cosas más valiosas las tengo yo, para mis nietos.

- ¿De qué tipo de cosas valiosas está hablando, ah? Soy muy cachuriento, tengo trofeos, fotos emblemáticas, diplomas, algunas escafandras, cosas marinas. Uno de mis nietos dijo que quería seguir mi legado, así que eso será para su futuro.

- ¿Tiene proyectos en mente para reinventarse? Lo más probable es que haga un restorán más chiquito, más manejable. El mundo cambió, también la cocina, creo que hay que hacer algo, llamémoslo más del estilo 'picada', más barato, más popular, para que la gente tenga acceso. La idea es buscar otras alternativas.

- Un librito no estaría mal... He golpeado puertas para vender mi último recetario y me lo han negado. La única que me ha apoyado es Rosita Parsons, que lo vende en el Parque Arauco. Lo otro lo he ido regalando, no queda de otra.

- ¿Y la TV? Sí, me encanta. Siento que algo puedo aportar, me mantiene activo, me gusta mucho ser jurado. Me entretiene la televisión, fui uno de los pioneros. Es un vicio este medio.

Legado de Coco Pacheco

Pero el reconocido chef no ha perdido su tiempo, ya que en Chiloé tiene uno de sus tesoros más preciados, con el que espera dejar algo más que una herencia gastronómica.

Se trata del museo "Las conchas de sus mares", un espacio con el que busca llenar de cultura marina y fomentar el turismo en la región. "Es una colección única que la recibí de mi consuegra, la Isla necesita educación y conocimiento. Quiero irme para allá para activar al museo, aunque desde marzo que no puedo ir, está paralizado, estoy con los brazos cruzados", contó.

- ¿Tiene fecha de lanzamiento? Si Dios me da la fuerza quiero terminar este proyecto lo antes posible, ya llevo cuatro o cinco años en esto. Es que son tantos trámites.

- Supimos que tiene hasta cafetería el palafito. Sí, es cierto, y eso ayuda a financiar el proyecto, con la cafetería vendo souvenirs. Además, es para que a futuro mis herederos no tengan que preocuparse por eso y pueda seguir en pie, no les voy a dejar ese cacho.