En el más reciente episodio de The goop podcast, espacio que conduce Gwyneth Paltrow, Kim Kardashian sorprendió a propios y extraños admitiendo que, desde hace un tiempo, le dio una chance al copete.

En sus palabras, es una forma de relajarse y cambiar sus hábitos, ya que se sentía hundida en el trabajo.

“Empecé a beber un poco a la edad de 42 años. Café y alcohol. Siento que tengo que soltarme un poco. Simplemente siento que trabajo mucho y me concentro”, fueron sus palabras en particular.

Incluso, se animó a detallar su rutina diaria de trabajo, que le motivó a este cambio: “Todo el día después de la escuela, luego en reuniones de productos, pruebas de cosas, reuniones de empaquetado y todo para Skkn”. Tras esto, claro, quedaba “simplemente tumbada haciendo nada”.

“Entonces”, continuó, “mi versión de eso ha sido pasar un tiempo con mis amigos y tomar un trago y quedarme afuera un poco más tarde, cuando probablemente no lo hubiera hecho antes”.

Llegaron, como era de esperar, las preguntas: ¿cuál es su trago preferido? ¿Y cuál es la dosis?

Y la empresaria no se guardó nada, aunque aclaró que toma poquito: “Solo tiene que ser un pequeño trago de piña y un trago de tequila. Ha sido divertido”.