A comienzos del nuevo milenio, una de las novedades en la guerra de las teleseries, es que se llevó hasta la franja nocturna. La idea era trabajar producciones más arriesgadas en cuanto a contenido. Un ejemplo fue Ídolos (2004), la primera apuesta en que se abordaron temas como el lesbianismo, la drogadicción y los tríos sexuales. Una idea qu no siempre resultó agradable para las actrices, como recordó Claudia Pérez.

En charla con el Podcast Reyes del Drama, la actriz recordó su participación en las primeras nocturnas."Nunca imaginé la exposición que iba a tener esa teleserie -señaló-. Lo hice sin conciencia. Me parecía súper interesante abrir un espacio nuevo más adulto, más sexy, que se derribaran ciertos tabúes sexuales y colaborar con la libertad de las cabezas y mostrar otro tipos de relaciones que ahora están más naturalizadas como el poliamor, que ahora están más naturalizados. Era casi soft porno, teníamos prácticamente sexo explícito".

Pérez interpretaba a una mujer que se involucraba en un triángulo amoroso junto a una amiga, que era interpretada por Lorene Prieto. "Si bien no se mostraba nada y se cuidaba, a mí me hubiera gustado que me cuidaran más -señaló-. Habían escenas donde yo estaba súper incómoda y no me atrevía a decirlo porque si lo decía te podían echar, no sé. Era chica, no sabía como decirlo".

Sin embargo, la actriz detalló que disfrutó la experiencia. "Fue un regalo estar ahí. Me encantaba mi personaje, tengo muy buenos recuerdos".

Un aprendizaje

Pero no todo fue positivo. Claudia Pérez señaló que recibió críticas por el personaje. "La gente se daba permiso para gritarme cosas donde mi personaje mostraba piel. De repente fue super incómodo. Pasé por momentos súper incómodos".

Incluso, eso la afectó a nivel familiar. "Por suerte mi hija era chica, pero también le decían cosas en el colegio. Fue un aprendizaje para aprender a decir que no en algunas situaciones. No le tomé el valor a donde iba a llegar esto".

Por otro lado, Pérez se refirió a las palabras de Lorene Prieto, quien señaló que se sintió "violentada", al grabar una escena en que se representaba una orgía sexual. "Súper lúcida Lorene. En esa escena dijo que estaba incómoda porque su pierna tocaba el miembro del actor y ella se para y dice que su límite es su pudor", aseguró.

"Encontré tan acertada esa frase porque el límite es algo que pone uno. Y se fue. A mí me pareció tan buena esa frase porque eso es -agregó-. No tiene que ver con el límite de tu compañero, ni del director, ni del canal. Cada uno tiene su límite según su biografía. Es tu límite y ese límite tiene que respetarse. Fue una experiencia incómoda pero yo aprendí mucho de ella".

A la actriz le preguntaron su volvería a trabajar en una producción con ese tono. "Ahora ni ca… haría una teleserie así -aseguró-. Estoy más vieja y más incómoda con mi cuerpo. Yo creo que ahora tendría la libertad de decir que no y si no le gusta chao".