Gabriela Arcos, una de las voces más queridas de The Voice: “Soy una business woman a mil, a mí me crió Taylor Swift”

La cantautora, que cuenta con dos EPs y una nominación al Pulsar como Mejor nuevo artista, develó de qué maneras le cambió la vida tras ser una de las participantes en la última temporada del programa de talentos. Además, contó acerca de su nueva canción que la aleja del folk y la acerca al indie rock titulada “Despacito”.

La historia de Gabriela Arcos cuenta con varias particularidades. La artista de 24 años y creadora de dos EPs hasta la fecha, inició su vida artística en cuarto medio. ¿La razón? Sacar una mejor nota en la asignatura de Lenguaje. De este modo, se presentó en un café literario junto a una amiga y empezó en el mundo de la música.

“Antes no tocaba nada, una vez me regalaron un ukulele y cantaba muy a escondidas. Yo tampoco sabía que cantaba bien, me gustaba cantar porque siempre lo hacía en clase webeando, y la gente quedó bastante sorprendida pensaban que cantaba como la Shakira porque tenia un vibrato, pero era porque estaba nerviosa”, explicó.

Con una adolescencia marcada por las canciones de One Direction y Taylor Swift, luego influenciada por el indie folk de las mexicanas Carla Morrison y Natalia Lafourcade.

“Fui una adolescente, muy adolescente, me gustaba mucho One Direction y Taylor Swift, y eran mis únicos dos referentes musicales, quizás otras cosas, pero nunca fanática de la música. Cuando entré a la universidad empecé a conocer más cosas, pero muy anglosajón. Ahora que yo hago música, empecé a escuchar música en español. De hecho, mi primer encuentro con música en español fue con Natalia Lafourcade y Carla Morrison”.

Ya en 2021, Arcos liberó dos EPs: A solas, el cual fue la carta de presentación de este folk melancólico, y ¿Nos veremos en diciembre?, un trabajo muy ligado a su primera entrega, pero marcado por la Navidad, una fecha especial para la cantante.

Pero sería en el programa de talentos The Voice Chile durante este año, donde se haría muy conocida, ya que a pesar de no clasificar en las audiciones a ciegas se quedó con el cariño del público por su humor y “chispeza”. Un registro que actualmente supera las 300 mil visualizaciones y que en su momento fue en tendencia en redes sociales. Más tarde, llegaría al repechaje y donde tuvo un gran papel llegando a la final de esa instancia.

La nominada a los Pulsar en la categoría Mejor nuevo artista conversó con La Cuarta, a su estilo, para presentar su nuevo sencillo “Despacito”, puntapié inicial para su nueva era, donde dejará el folk y lo acústico por el indie rock y la distorsión. Y ojo, que contó la curiosa historia detrás de este single.

Asimismo, repasó parte de su carrera; habló de su participación en el programa y la fama televisiva; y reveló detalles de su estrecha relación con la Navidad y el por qué de su fanatismo por esta festividad, por la cual publicó un EP y se espera que saque un single con esta temática para el presente año.

Dejando atrás el folk por el indie rock, pero siempre con melancolía

El último lanzamiento de Gabriela Arcos, marcó una nueva visión de su trabajo, cambiando el folk y el intimismo, por las guitarras distorsionadas y crudas, algo que expuso ya en “Despacito” y que confía seguir sacando material con esa misma línea en los próximos meses. Igualmente, este sencillo previamente mencionado esconde desamor y cotidianidad en su lírica.

¿Qué trataste de exponer en tus dos EPs anteriores? Igual tienen dos moods distintos…

—En A solas, hice música que se me hizo natural hacer, me acuerdo que se le mostré a mis amigos y me dijeron que ‘era exactamente lo que ibas hacer tú' jajá. No sé come sentirme con ese comentario. Y fue lo que se me hizo fácil que era el folk y creo que para el segundo EP era lo mismo, pero como lo estábamos haciendo navideño a propósito, le pusimos más violines, cascabeles, trompetitas, no diría que tenia algo distinto. De hecho, hay canciones que hacen referencias directas a canciones del primer disco, era una continuación.

—¿Y ahora con este nuevo disco?

—Ahora con el disco que estamos haciendo estoy tratando de desafiarme y hacer música distinta por así decirlo, sigue siendo mi misma línea, pero me esfuerzo para que sea otro, por ejemplo, tengo una playlist con canciones que me gustaría copiar, no las copio, pero es como me gustaría que suenen.

—Todas estas canciones son influencias a tu disco…

—Sí, es como me gustaría, en realidad me gustaría hacer algo como Phoebe Bridgers, que tiene canciones rockeras, también entre medio folk, igual pop, como alternativa.

—Claro, este nuevo single es una propuesta distinta, pero tiene la melancolía de siempre…

—Sí, bueno soy lo que soy jajá. Esa canción la escribí a finales del 2020, ha pasado por muchas mutaciones, primero lo iba a lanzar en un compilado acústico, a esa versión la llamamos la versión Amango, era como una canción sacada del A solas, muy popera y media cliché, después dije que quería hacerla más folk y la canté como ranchera.

“Después, la mandamos para un concurso donde tenía muchas segundas voces, era un desastre, mucha información. No ganamos el concurso claramente. Ahora decidí sacarla sola, la encuentro ahora más orgánica, más de banda, esa canción la tocamos en vivo y suena igual a como suena en el disco y eso me gusta”.

—“Despacito” es una canción con muchos cambios…

—Ha pasado por muchas cosas, ya ni tiene segunda voces, que es algo muy mío, antes mi música tenía muchas segundas voces, tenía violines, sería bacán sacar un compilado con todas las versiones de “Despacito”. Pero la que esta ahora es mi favorita, es lo que identifica más a lo que quiero hacer.

—Igual este tema esconde una historia, ¿de qué trata?

—Jajá, ¿en detalles o en grandes rasgos?

En detalles estaría bueno…

Es una historia chistosa, me gusta contarla porque a veces la gente piensa que escribir una letra viene de una inspiración muy grande, de grandes momentos de vida, solo pasó que con una pareja compartíamos el mismo desodorante jajá y cuando terminamos más tarde ese desodorante se me acabó, era el único recuerdo que tenía de esta pareja. Y tuve que ir a comprar y era tomar esta decisión consciente de comprar el mismo desodorante y estar pegada en esta historia o comprar otro desodorante y seguir con mi vida, y decidí comprar otro desodorante. Y llegando a mi casa dije ‘esto es una buena canción para contar la última historia’.

—Profundo igual, tiene su historia…

—Es una tontera, me gusta decirlo, porque grandes canciones salen de grandes tonteras. Hay canciones que salen de una estupidez y digo ‘es un buen tema’.

—“Despacito” será parte de tu álbum que sacarás en 2023, ¿cómo va el proceso de creación del disco?

—Todo va viento en popa, de hecho. Se supone que, si todo sale bien, a principios del otro mes va haber una colaboración.

—¿Con quién? ¿se puede saber?

—Qué sea sorpresa, pero sí tiene que ver conmigo, la gente que me sigue va decir ‘oh buena bacán’, también se viene una sorpresita en Navidad, ya declaré que la Navidad es lo mío. Yo creo que mientras hacemos los singles van a ir saliendo y el disco saldrá en mayo o junio del otro año.

Loca por la Navidad

El fin de año está a la vuelta de la esquina en este 2022, asimismo, la Navidad se acerca a pasos agigantados, bien lo sabe Gabriela Arcos, pues esta festividad suele ser muy especial para ella, prueba de esto es que incluso creó un EP con respecto a esta temática, el cual es ¿Nos veremos en diciembre?, trabajo donde esta “En diciembre (me haces falta)”, su corte más exitoso hasta la fecha en Spotify con más de 170 mil reproducciones. Esto no es todo, ya que prepara otro lanzamiento navideño.

—Me gustó eso de la Navidad, ¿cómo será? ¿algo como el EP que sacaste?

—No será un EP, será solo una cancioncita, un regalito. Las Navidades son lo mío, es un chiste interno, todo ligado a las Navidades en familia. Ya que la Navidad pasada fueron las Navidades infelices ahora serán las Navidades felices jajá.

—Gabriela Arcos es una fanática de la Navidad, ¿fecha favorita?

—Fanática, me gusta Halloween, pero termina y revivo. No sé si has visto que Mariah Carey está encerrada en un closet y es 1 de diciembre e intenta salir del closet y está vestida entera, esa soy yo.

—¿Por qué ese amor por la Navidad?

—Yo creo que por mi mamá, hizo mis Navidades muy especiales, mi casa estaba llena de decoraciones, señora loca por la Navidad. Y nunca fueron Navidades ostentosas en términos de regalo. Era más la idea, siempre lo pasaba con mi familia, era un bonito momento, duraba como dos días la Navidad teníamos nuestras tradiciones, bueno todavía.

Imagino que ya en noviembre estaba decorando la casa…

—Sí, y no es chiste.

—Somos dos, mi mamá hace lo mismo jajá...

—Es que es una wea muy chilena, hay dos extremos unas mamás que no le gusta la Navidad o que empiezan a decorar onda ahora.

—Ya termina octubre y empiezan salir los árboles…

—De hecho, el año pasado cuando estábamos haciendo el disco por el tema de las sesiones de los fotos, mi casa estaba de Navidad en octubre y estuvo así mucho tiempo.

Un mediático paso por The Voice

Tal vez muchas y muchos conocieron a Gabriela Arcos por su participación en The Voice, con una audición marcada en un inicio por las distintas muecas y señas que se ganaron al público, posteriormente cantaría “Nunca es suficiente” de Natalia Lafourcade y en formato a capella interpretaría su tema “El humo”. Lamentablemente, ningún coach se dio vuelta, pero esto no impidió que bromeara con Yuri, Beto Cuevas, Gente de Zona y Cami.

Rápidamente la personalidad espontánea de Arcos conquistó a los televidentes que la hicieron tendencia en redes sociales. Después, arribaría al repechaje donde alcanzaría las finales. Su análisis y detalles de su paso por el programa de talentos, a continuación.

—Otro tema, es que te hiciste muy conocida por The Voice, no clasificaste, pero te hicieron hasta notas, subieron tus seguidores, se puede decir que la hiciste…

—La súper hice.

—¿Cómo nació la idea de participar?, ¿Buscabas seguir avanzando o solo mostrarte?

—Soy una business woman a mil, a mí me crió Taylor Swift, todo lo que sé son negocios (ríe). Yo ya estaba haciendo mi música y vi que estaban haciendo el casting para The Voice, no voy a mentir siempre desde chica pensaba, ¿si fuera a un concurso qué canción que cantaría? Tenía esa fantasía. Yo igual miraba eso religiosamente.

“Salió en la tele la situación y le hablé a la persona que me produce, y le pregunté que opina sobre esa cuestión (de participar) y me dijo que no le pareció una buena idea porque hay un estigma con los concursos de talentos, pero también me dijo que tiendo a tener ideas, no tontas, pero leseras que se me ocurren y funcionan. Por ejemplo, hacer un EP de Navidad que pensábamos que nadie iba pescar y le fue mejor que todo lo que he hecho. Y me dijo ‘haz lo que queraí’”.

—¿Cómo fue el proceso?

—Mandé mi video en diciembre e hice mi audición en Semana Santa, en abril, es muy largo el proceso. Yo solamente quería tener esos minutos de televisión, hubiese sido bacán quedar, pero me acuerdo que antes de subirme al escenario le dije a mis hermanas que ojalá nadie se de vuelta, porque fueron meses tortuosos, como que ya era todo pajero. Igual cuando nadie se dio vuelta se me levantó un peso de mis hombros y por eso creo que pude tontear, porque estaba muy relajada. Ahí tenía la misión de hacer que la gente me conociera. Fue súper loco, mientras íbamos viendo la audición con mi familia y mi hermana miraba mi Instagram y veíamos como subían los números, de un segundo a otra tenía tres mil seguidores y después tenía 19 mil seguidores.

El poder de la tele…

—Yo pensaba que no se veía tele y es mentira la gente sí ve tele. Y mientras daban el programa salían notas.

Bueno, en Youtube el video tiene más de 300 mil visualizaciones…

—¡Fue trending topic en Twitter!

—Como lo dijiste toda una business woman, la hiciste, te hiciste conocida. Igual hablaste harto con los coachs, me acuerdo que te siguieron por Instagram algunos, ¿tienes relación con alguno de ellos?

—O sea, así como relación y hablar no, pero si buena onda con Cami, me invitó a su concierto y todo.

Entonces con Cami tienes más relación...

—Sí, bueno sin mencionar a Gepe. Entré al repechaje y él fue mi coach. Con el hablo más regularmente. Hay buena onda.

—Cuándo una colaboración, un temita por ahí...

—Mi meta en la vida es hacer una canción digna para Gepe y decirle ‘oye, ¿te gusta, querí?’. Todavía no escribo nada que sea digno jajá.

—Igual hay discos de Gepe que están en tu mood, en tu estilo, canciones que perfectamente podrían compartir playlist…

—Pucha soy una mala fan, pero ese disco que es amarillo o naranjo, y tiene un dibujito (Ciencia exacta), tiene una canción que se llama “Hoy”, ese disco me gusta mucho y me gustaría mandarle algo así, pero a mi estilo.

Por último, como un análisis, ¿tú cómo artista de qué manera ves estos programas? ¿Ayudan? Tenemos distintos casos, por ejemplo, Mon Laferte que ha criticado Rojo, mientras que Cami incluso fue jurado en The Voice...

—Yo creo que mi experiencia fue muy distinta a los chicos que estuvieron en la tele, la mayor parte del programa estuve en el repechaje que era en un estudio que parecía un living, éramos dos personas compitiendo y el coach. Era muy distinto. La idea del repechaje era que iba gente de la tele y competían contra nosotros. Ellos mismos decían que era muy distinto, que cuando cantaban en la tele estaban al borde del ataque de pánico, y donde andábamos nosotros, andaban relajados, o de la misma forma que en la tele le instruían lo que tenían que decir, a diferencia que en el repechaje te decían sé tú misma, cachái, esas cosas emocionales.

“Yo lo pasé muy bien, yo no tenía intención de seguir en la cuestión, pero decidí quedarme y dar lo mejor de mí porque era muy entretenido donde estaba yo. Si hubiese estado en la tele lo hubiera pasado pésimo yo creo, porque soy demasiado sensible y no acepto la intensidad en la vida”.

—¿Y como artista?

Pero en términos de cómo te afecta como artista, es como lo antónimo de abrumador, pero yo pensé que, por ejemplo, tuve todos estos seguidores en Instagram y dije buena voy a redirigir que todas estas personas escuchen mi música, de esos 40 mil, 10 mil escucharán mi música, dije bacán, la raja, con todos estos seguidores pensaba que me iba ir mucho mejor en vivo, pero de esos seguidores 20 van a las tocatas.

“Al final la popularidad que hay en redes sociales no se traduce a lo que uno necesita como artista, que es vivir, que me llegue plata jajá. Es un observación, pero igual no me quejo antes había 0 y ahora hay 20 y eso es bacán. Quizás llegué con muchas expectativas, como que mi vida va a cambiar, porque la gente que ve tele no es la misma que escucha mi música, y no es la misma la que te va a ver a un bar”.

Igual tienes seguidores fieles…

—Existen esas cosas y es bacán, por eso no me quejo pa’ nada, es solo una observación. Porque como que la gente igual me conversa, por ejemplo, tengo un podcast, Dime con quién andas, que hago con mi mejor amiga que también es mi corista y toca teclado. Yo creo si no tuviera esa fiel seguidilla de gente a la que le caigo bien, nadie escucharía, para no ser una persona famosa, igual nos escuchan 300 personas.

Un fin de año en el estudio

Gabriela Arcos tendrá un cierre del 2022 dedicado a trabajar en su próximo disco y en su sorpresa navideña. Lamentablemente, su show para este domingo 9 de octubre en Viña del Mar fue suspendido, una cita que la tenía compartiendo escenario con Martina Lluvias y El Lorenzo Paz.

Sin embargo, habrán más posibilidades para ver a la artista en vivo, pues vía redes sociales anunció que se presentará el 13 de noviembre en Matucana 100 (Santiago) y el 18 de diciembre en el Rockdromo (Viña del Mar). Para más información seguir sus redes sociales.

COMPARTIR NOTA