Instagram se ha vuelto una de las plataformas más importantes para los famosos, ya sea para ganar plata o, simplemente, entretener al mundo. Este último cometido es el que tiene a la abogada Helhue Sukni apretando "REC" en su celular a diario, para darle forma a una especie de reality de su vida común y silvestre.

Los clip son artesanales, siempre con un toque de humor, espontáneos e impredecibles, fiel retrato de su personalidad.

"Todo partió cuando estaba trabajando en 'No culpes a la noche' y me fui a Punta Cana, el equipo me pidió que grabara videos de mi estadía allá. Le pedí a mi asistente que me ayudará y los hicimos, algunos salieron. Cuando volví le dije a la Marce (su nana) que me ayudara a grabar un video secándome el pelo, para enseñarle a los cabros, lo subí a mi Instagram y fue furor, a los cabros les encantó", comentó Helhue sobre sus inicios documentalistas.

- Una sultana de la tecnología, full millennials, Helhue. Noooo, te mueres, no sé ni subir historias, jajajá. Pero los videos son más fáciles y me encanta hacerlos. Todos mis videos son improvisados y me muestro tal cual soy. Quizás no le enseño cosas importantes a los cabros, pero me gusta que me escriban "me hiciste el día" o lo mucho que le gustan mis videos.

- ¿Quiénes conforman tu equipo? Depende de donde esté, cualquier persona me graba, en el aeropuerto, en el centro de justicia, donde sea... A mí no me da plancha, nada que ver, total la vida es una sola. A mis hijas les da un poco de plancha, no salen mucho en mis videos. Además, con todo lo que ha pasado en Chile... Pero son jóvenes es lo típico.

- Te han hecho hasta memes. Sí, y me encanta. Me mato de la risa con todo lo que escriben. Cuando salgo revolviendo mi "Aperol" con un cuchillo, muy gracioso.

- Y los comentarios mala leche en Instagram, ¿te afectan? Yo no pesco, no contesto esos mensajes mala onda. Me da risa porque a veces pelean entre ellos, a mí me da lo mismo lo que digan.

Chao canje. Esta nueva vida de influencer le ha significado ser contactada para recibir importantes ofertas y regalos de parte de seguidores, que esperan hacer conocidos sus productos a través de sus redes sociales. Pero ella prefiere mantener un perfil de entretención, sin marcas de por medio.

"Los emprendedores siempre me escriben para mandarme regalos y todo, pero la verdad es que no acepto, ya que mi función en Instagram es hacer reír, que mis seguidores la pasen bien", finalizó.