Jorge Alis analizó show de George Harris en Viña: “No trabajó nada en la rutina que vino a hacer”

Jorge Alis analizó la rutina de Jorge Alis.
Jorge Alis analizó la rutina de Jorge Alis.

El comediante que ha triunfado dos veces en Viña del Mar opinó sobre el fallido show del venezolano.

Jorge Alis, voz autorizada para hablar de cómo triunfar en el Festival de Viña, analizó la presentación de George Harris en la Quinta Vergara, quien recibió pifias de parte del público y una defensa de parte de sus compatriotas venezolanos, generando un ambiente caldeado.

Durante la mañana, el argentino-chileno estuvo en el matinal Tu día (Canal 13), donde entregó sus impresiones sobre el fallido show de Harris: “Momentos duros para cualquier persona”, partió diciendo.

“Es novedoso para la Quinta que venga alguien de afuera que no se conoce”, planteó a modo de contexto. “También, para alguien que ya fue, tienes que sorprender de alguna manera distintamente”, haciendo alusión a su propio caso, habiendo estando en las ediciones del 2014 y 2019.

“Pero, ayer, creo que: cuando la gente no quiere escuchar algo que vos estás hablando, no te puedes empecinar en seguir hablando del ‘teléfono’ cuando ya fue”, criticó. “Es como hablar de la pandemia”, dando a entender que no es un tema que genere mucha popularidad.

Así que “este chico como que no enganchó nunca”, evidenció.

Alis recordó que, en su momento, también fue pifiado cuando se subió al emblemático escenario: “El humor puede derribar cosas tremendas; yo estuve como seis minutos que me pifiaron, como que se reían, y se escucha todo, (hasta) el tipo que vende bebidas”, repasó. “El humorista escucha hasta el último suspiro que hay en la galería”, así que “claro que te puedes confundir”.

La sentencia de Alis

A juicio de Alis, “Harris no trabajó nada en la rutina que vino hacer acá”, declaró. “No tiene trabajo eso, se nota; no tiene humor, no tiene remate, no hay un objetivo de hablar de nada”, porque “lo tenía todo pintado para hablar de los venezolanos en Chile y el mundo”, observó sobre el potencial que manejaba.

“Yo creo que a él le guste pelearse”, analizó. “No habló de nada”. Y también criticó que no haya adaptado sus modismos al público chileno: “No puedes decir ‘coño’ cuatro veces, tienes que decir ‘hueón’”, y puso sobre la mesa el tener internet a mano para instruirse.

“Y se le respetó mucho”, agregó sobre el público, o sea, inicialmente los espectadores se habrían mostrado abiertos a escucharlo. “No te puedes pelear con el público”, remarcó. “No hay vuelta atrás”, porque “el público es un niño que te está creyendo, que tiene una licencia poética de entender que lo que estás contando es verdad y que se va a reír y divertir; es como pegarle un cachetazo al niño y decirle que ‘¡eso no se hace!’... ¿De ese lugar cómo vuelves atrás?”.

En vez de eso, “tienes que tener una batería de chistes como para contrarrestar un momento como ese, en que no enganchaste”, continuó. “La tenía pintada para hablar de los venezolanos, (con) chistes que ya están instalados de la sociedad”.

“Se notaba la falta de trabajo total”, sobre todo con las idas y vueltas del escenario, insistió. “Al final la gente ya no esperaba humor”.

Además, “sentí que era un poco antiguo el humor; cuando hablas de ‘la mujer limpiando...’, es algo que ya pasó para nosotros”, añadió. Y reconoció que “se demoraba mucho, pero creo que estaba noqueado; cuando estás noqueado empiezas a repetir, y aparte se notaba en ese caminata de un lado a otro, como que buscaba el guion y no sé dónde lo dejó”, cerró.

COMPARTIR NOTA