Anoche, en una nueva emisión de "Sigamos de largo", Daniela Aguayo hizo una particular reflexión al hablar sobre su nueva vida como mamá. Es que el nacimiento de la pequeña Amal trajo varios cambios en la vida de la comediante.

"Si la Amal hubiera sido hombre, no sé si hubiera pasado, pero como es mujer, hay chistes que no quiero volver a contar, hay cosas de las que no me quiero reír", dijo de entrada, para luego explicar su cambio en el humor.

"Sacaría todos los chistes donde yo me trato de fea, porque encuentro que para la Amal voy a ser hermosa. No quiero seguir con ese bulling que me hago siempre", aclaró.

La "Chiqui" también contó que quiere frenar con los prototipos de belleza, pues "no quiero perpetuar que todas tengamos que ser flacas raquíticas ni encajar en los moldes. Le he dado hartas vueltas a los chistes", confesó.

Esto, porque la comediante piensa a futuro, y si algún día invita a su hija al escenario, "no quiero que salga a decir garabatos".