Un tema bastante comentado fue el trato de los panelistas de Primer Plano a María Paz Arancibia este domingo 17 de agosto.

La periodista fue invitada para conversar sobre la denuncia de maltrato laboral que acusó por parte de su compañera en el Sígueme, Daniela Aránguiz.

Cabe destacar que Arancibia, tras sus 10 años en Chilevisión, posteriormente pasó a ser parte del programa farandulero de TV+.

“Era una animosidad constante. No entendía por qué. Creo que les molestó que yo llegara medianamente preparada, que reporteara los temas y opinara con bases”, expresó en el podcast Juzgamos y no funamos sobre cómo fue su participación en el espacio que dejó por su salud mental.

En este escenario fue invitada al estelar, sin embargo, televidentes explotaron por cómo fue recibida por los panelistas Francisca Merino, Catalina Pulido y Pablo Candia.

Ganándose el repudio de varios telespectadores, por ejemplo, el Consejo Nacional de Televisión recibió 1.682 denuncias según consignó Glamorama.

Por otro lado, hasta expertas han salido al baile por los dichos de Merino sobre el bullying.

“Si al final, lo que está dentro de uno es lo que atrae, y cuando más se nota es cuando llegas a trabajar a un equipo de trabajo, o en el colegio. Es como el niñito que todos se burlan, algo hay en ese niño”, dijo Pancha hace unos días.

Algo negado por la psicóloga Camila Bascou, supervisora clínica y magíster en Psicoterapia, en conversación con Bío Bío, quien detalló que la víctima de acoso nunca es la culpable.

“El bullying no es consecuencia de una carencia personal, sino de una dinámica de poder y violencia. Atribuir responsabilidad al niño o a la persona que lo sufre solo refuerza la estigmatización y aumenta su sufrimiento. Las investigaciones en psicología muestran que lo determinante no es cómo es la víctima, sino cómo se organiza el grupo y qué conductas se toleran o refuerzan”, señaló la profesional en salud mental.

Con el Diario Pop, María Paz contó vivió su regreso a su ex canal.

“La idea no era escucharme ni empatizar ni condenar”

-¿Por qué elegiste ir a Primer Plano a contar tu verdad?

-Se me invitó a conversar sobre las malas prácticas de algunos personajes televisivos. La producción me hizo ese planteamiento: “Mira, estamos sorprendidos con tus declaraciones. Y tú viviste un poco eso, queremos abrir el debate”. Perfecto, les respondí. Cuenten conmigo.

-¿En la previa tenías reparos por el panel?

-Me interesaba volver a la pantalla porque hace un mes aproximadamente consideré que sería bueno volver a trabajar en mi área: las comunicaciones. Y que, tal vez, esa instancia podría servir para hablar también de mí, proyectos, ideas, etc. Pero nada de eso fue posible. La verdad es que proyecté lo que podría pasar. Pensé: bueno, seguro habrán voces detractoras, pero la realidad superó para mal mis expectativas.

“Al final, ahora veo que daba igual qué o cómo respondiera. Obviamente, la idea no era escucharme ni empatizar ni condenar, como se me planteó al comienzo. Y no, no tuve reparos con el panel, porque yo sabía dónde me estaba metiendo, aunque desconocía quiénes estarían en el set. Pero me daba igual, siempre pensé que tenía las herramientas para debatir y quería invitar a la cordura y al sentido común. Ingenuamente pensé que nadie se resistiría a un buen argumento, pero no. Porque se me vendió una propuesta y desarrollaron otra. Ahora entiendo que la única manera de hacerle el peso a lo que viví era meterme en el barro y jugar bajo y sucio, y creo que en general la producción sabía que no lo iba a hacer. Entonces, más cruel aún”.

-¿Cómo viviste el programa?

-Mi participación tuvo de todo. Te juro que cuando se me invitó, me alegré. Volvía a mi ex canal, al lugar que habité más que mi propia casa por 10 años. Y volvía con más experiencia, fortalecida después de lo que viví en el Sígueme, con ganas de volver a mostrarme, porque no es fácil encontrar la confianza para salir a defender causas en un medio tan masivo como la tele y en un formato como la farándula, donde parece que todo está permitido. Pero me ilusioné con la invitación y me sentía preparada.

“Eso fue antes de caer en las garras de los opinólogos de PP, que lograron estresarme y angustiarme. No lo pasé bien emocionalmente, pero esas son conclusiones que saco ahora, porque la situación me dejó en shock. Esa es la mejor definición. Salí de ahí con la cabeza y guata revuelta, y creo que estuve a punto de caer al -8. Pero, ¿sabes? El último tiempo estuve, entre otras cosas, entrenando mucho mi cabeza porque soy una persona ansiosa, y cuando llegué a mi casa saqué pecho, no sé de dónde, y me propuse no caer en crisis. Decidí encarar lo que había vivido y tomé mi celular. Diez minutos de revisar reacciones bastaron para sentir alivio. El apoyo era masivo y las sensaciones de quienes fueron testigos televisivos era de repulsión. Jamás pensé que tantas personas lo vivieron conmigo. Lo pasaron igual o peor que yo, y eso me dejó impactada”.

“No tengo idea si es que estaban bajo los efectos del alcohol”

-¿Qué te pareció esa extraña comparación que hizo Pancha Merino sobre el bullying?

-Lo de Merino fue una brutalidad. Pero en ese minuto yo ya no procesaba tanto. Creo que lo que viví se parece mucho a lo que experimenta alguien en manos de una personalidad psicopática. Eso que pasa cuando la violencia y manipulación es tal, que una víctima incluso empieza a dudar de su propia verdad. Porque cuando comencé a escuchar una y otra vez que yo era una mentirosa, oportunista, conflictiva, comencé a sentirme disminuida emocional y cognitivamente. Y pensaba: ¡pero esto sí me pasó! ¡alguien tiene que entender que es cierto! Ay, no sé, fue un momento doloroso.

-¿Es verdad que andaban bajo los efectos del alcohol?

-No tengo idea si es que estaban bajo los efectos del alcohol. Pero si lo estaban, ya sabemos que en el carrete ellos serán los curaos odiosos, ja, ja, ja.

-¿El panel es amigo de Dani Aránguiz? ¿Crees que todos estos rostros de la vieja farándula se protegen entre ellos?

-Quedó demostrado que actúan en bloque. En parte, por eso salí del Sígueme. No sé a qué se deba, pero imagino que solo resguardan el bolsillo. No me lo explico de otra manera, porque ¿para quién es esa televisión? ¿Alguien realmente valora ese tipo de contenido? ¿Alguien lo espera? ¿Alguien piensa que se merecen un lugar en pantalla? No sé, yo pienso que las grandes figuras, referentes, fueron leyenda porque contaron con el cariño del público y entregaron algo en su estadía en el medio.

“Estoy muy agradecida del apoyo”

-La gente te ha apoyado con varias denuncias contra Primer Plano, ¿cómo lo tomas?

-Estoy muy agradecida del apoyo. Y quiero retribuirlo de alguna manera, porque ha sido mucho. Ellos no lo saben, pero me ayudaron a sobrellevar el trago amargo, han sido mi contención, absolutamente.

-¿Qué se viene ahora para ti?

-Quiero seguir entregando algo bonito. Algo digno de ser escuchado y mirado. No sé dónde, probablemente en redes sociales, pero pienso que si la gente lo pide es por algo.