Miguel Mateos (70), prócer del rock argento, vuelve a nuestro país para llevar todos sus clásicos a su fiel público chileno, el primero que le abrió las puertas en el extranjero, en un tour por diversos escenarios de nuestro territorio.

“El jefe del rock en español”, como se le apoda, ya tiene más de 40 años de carrera profesional, primero comenzando con su grupo Zas, para después incursionar en solitario con su propuesta. “Yo soy una especie de artista pop rock, que es la manera que humildemente me defino”, dice a La Cuarta.

Pues varias de sus canciones salían de la cosa más ruda para cantarle al amor, de letras mayormente sensibles o en lo musical con el uso de sintetizadores. “Obsesión” una prueba de su cepa bailable.

Previamente en 2024 estuvo por partida doble presentando su show sinfónico en el Caupolicán y después en el festival Santiago Rock, el cual congregó a varios referentes de la talla de Los Tres, Virus, Los Fabulosos Cadillacs, además del mencionado Mateos.

Ahora, a pesar de sus varios años en el ruedo, la magia y el encanto no se pierden, ya que está “feliz con esta nueva patriada”, poniendo énfasis en que hace 4 décadas fue la primera vez que pisó nuestras tierras.

Este músico de conservatorio devenido en rockstar revive ese contexto: “Una situación política y social complicada para Chile y para Argentina también. De alguna manera nosotros ya habíamos recuperado de alguna manera la democracia, pero ustedes seguían ahí. Fue muy especial el concierto esa vez, tuvimos muchos problemas, pero eso es el rock & roll, el rock latino que tiene que ver con una actitud contestataria”.

Según el trasandino, fue Rockas Vivas (1985), su primer disco en vivo, el que le trajo el éxito afuera de sus fronteras. Un trabajo grabado dentro de 5 funciones en el Teatro Coliseo de la capital argentina. Proyecto que cuenta con 9 temas, los cuales pertenecen a los primeros LPs de Miguel Mateos/Zas: Zas (1982), Huevos (1983) y Tengo que parar (1984). Solo uno de estos temas es inédito y de grabación en estudio, “Perdiendo el control”.

“La idea de toda esta exposición, de presentar todo este espectáculo, tiene que ver con mi hijo Juan, que está en mi banda, toca la guitarra estupendamente bien. Él me trae una aplicación del teléfono. Me dice ‘¿quieres rock? ¿rápido o lento? ¿melodías? ¿letra dedicada a mi abuela?’ chic, chic, y a los tres minutos tenía una canción creada por inteligencia artificial dedicada a madre”, nos revela, pues llama a volver a la origen, a la música hecha por personas.

-¿Y Miguel, cómo era hacer rock en los 80? Porque era una Latinoamérica muy distinta, como usted mismo lo mencionó, llena de dictaduras, era mucho más gris el continente…

-Era difícil, era ir a luchar contra mucha adversidad. La situación política, social... Y me acuerdo que esas canciones del 81 al 85 son de un momento particular de Latinoamérica, hecho a sangre, fuego y lágrimas, estando borrachos, sobrios, a partir de una realidad humana.

-¿Y cuál es la importancia del Rockas Vivas para su carrera?

-Es la explosión, mi disco que explota en Buenos Aires, en Argentina. Y el primer país fuera de la Argentina donde empiezo a sonar es Chile. Es un álbum que después se internacionaliza, me da la posibilidad de hacer grandes shows. Antes tocábamos en bares y ahí cambió la historia.

-¿Y cómo ha cambiado Miguel Mateos en estos 40 años?

-Obviamente he madurado y tiene muchas cosas a favor. Imagínate, en pleno 80, con todo el vértigo que representaba, todos los grupos en esa época a full. Fue muy potente esa época desde todo punto de vista. Ahora creo que canto mejor, toco mejor el piano, hago mejores shows, soy más profesional.

-El rock argentino de los 80 es una camada, debe ser de las más excepcionales que ha tenido la música argentina, con distintos ritmos, pasando con influencias del reggae como con Sumo, new wave con Virus, canciones que todavía escuchamos...

-Sí, yo en particular me siento muy afortunado. Mucha de la gente que nombraste no está más, lamentablemente. Como dije, me he cuidado.

“Canciones de verdad, nada más”

-Rockas Vivas líricamente habla también del contexto histórico en que se estaba transitando, de la dictadura con “Un gato en la ciudad”, “Tirá para arriba”. Son canciones que claramente tenían esta metáfora. ¿También se puede traducir con el hoy, con harto autoritarismo emergiendo?

-Hay una revalorización de la derecha. Siempre esas canciones son buenas para recordarnos el valor de la libertad, el valor de las instituciones, el valor de poder elegir.

-¿Qué nos puede adelantar del show del Movistar?

-Son las canciones hechas a sangre, fuego y lágrimas. Por eso no, porque nada más lejos de la inteligencia artificial, nada más lejos de lo sintético, nada más lejos de la simulación, canciones hechas en un periodo en donde pasaban un montón de cosas, y por las cuales también se luchó y se ganó. Donde toca toda la banda, ¡loco, se toca en vivo!. Esta es la contraposición, canciones de verdad, nada más.

-¿Algún artista de rock argentino joven que le guste ahora que nos quiera recomendar acá al lector de La Cuarta?

-Me parece muy simpático, lo más refrescante que ha salido a mi juicio son Ca7riel y Paco Amoroso, son simpáticos.

-¿Para finalizar, cuáles son sus top 3 del Rockas Vivas?

-“Solo una noche más” es un rock and roll muy fuerte y tiene que ver con eso, con una noche más, con este momento también con seguir adelante, ir por más. Sin duda que “Perdiendo el control” también de alguna manera, porque es mi primera inserción dentro de lo tecno en ese momento, 40 años atrás. Y obviamente “Tirá para arriba” por todo lo que significa a todo nivel.

-En “Perdiendo el control” cuando canta ‘Y si te dibujo sin rostro | Es porque amo tu interior’, alta frase. ¿Quién fue la musa?

-Es un secreto.

-¿Pero es un ex amor?

-Así es...

Perdiendo el control en Chile

El músico agendó tres presentaciones, la primera fue en Temuco este 26 de junio. Hoy 27 llevará la potencia de Rockas Vivas al Gran Arena Monticello de San Francisco de Mostazal. Entradas disponibles en Ticketmaster.

Posteriormente, cerrará con broche de oro en el Movistar Arena este 29, donde también promete otros éxitos de su discografía. Los boletos en este show están a la venta por la plataforma Puntoticket.

Revisa la lista de precios del Movistar Arena aquí:

• PRIMERAS FILAS: $79.350
• DIAMANTE: $56.350
• PLATINUM: $44.850
• PLATEA BAJA DIAMANTE: $75.900
• PLATEA BAJA GOLDEN: $44.850
• PLATEA ALTA GOLDEN: $41.400
• PLATEA ALTA SILVER: $33.350
• TRIBUNA: $21.850
• SILLA DE RUEDAS: $41.400
• ACOMPAÑANTE SILLA DE RUEDAS: $41.400