Nos dejó Javiera Suárez, la más luchadora de todas

Javiera Suárez dejó un ejemplo de batalla que inspiró a todos en nuestra sociedad. Ella se encargó de hacerlo saber y de dar muestras de entereza.

La lucha por erradicar su cáncer llegó ayer a su destino final para Javiera Suárez, quien en su tránsito de tres años dio la pelea, a veces extenuante, para darse otra oportunidad con su familia y, cómo no, darle una lección de fe a todo un país gracias a un empuje que le valió levantarse crisis tras crisis. Eso, hasta ayer.

Aceptó orgullosa perder su larga cabellera por las quimioterapias, pidió apoyo en redes sociales cada vez que necesitó de energías o una cadena de oración y, sobre todo, no dejó nunca de empujar el carro de su lucha hacia adelante.

Así se vio en su último posteo en Instagram del pasado lunes, una foto de ella junto a su hijo y un altar se llenó de comentarios de personajes de la TV quienes con sentidas palabras le dieron su más profundo apoyo y afecto. El mismo que le entregaron en su adiós desde la Clínica Alemana.

Su legado

Javiera se tituló de la Universidad Finis Terrae y en 2008 debutó como notera en el extinto matinal "Juntos", de Canal 13. Sin embargo, su talento se hizo notar y a los pocos meses fue reclutada para ser panelista del desaparecido "SQP" de Chilevisión.

También estuvo en "Pollo en Conserva", de La Red, y "Así somos" de la misma estación. Luego tuvo experiencias en "Secreto a Voces", de Mega, uno que otro programa en televisión y su participación en "El rincón de Salfate", en FM Tiempo.

Pero como a todos, a Javiera las cosas a veces también se le ponían cuesta arriba. Hasta que la contrataron como animadora en el "No eres tú, soy yo", programa de Zona Latina, útlimo espacio donde participó de manera estable.

En ese tiempo encontró el amor, se casó con el cirujano plástico Cristián Arriagada y a poco de dar el sí en el altar supo la gran noticia de que sería mamá.

Con todo, esa alegría duraría poco, porque a pesar de querer a su hijo (Pedro Milagros), recibió la noticia de que tenía cáncer.

En 2010 se extirpó un lunar maligno de su brazo, pero nunca más chequeó esa operación. Por este procedimiento es que en 2016 se entera que tiene cáncer justo en el tiempo en que espera a su hijo.

Y aunque la recomendación médica fue no tener al bebé, prefirió entregarse a la fe para darle curso a su embarazo y en octubre de 2016 nació su mayor bendición, su hijo Pedro Milagros.

En el camino, Javiera encontró contención, cariño y se empoderó de su historia de vida. Por esto, y pese a una serie de fuertes recaídas, el 8 de mayo de 2018, lanzó su libro de comida saludable "Liveat", páginas que plasmarán para siempre el amor que le puso a todo lo que hizo en su vida.

El maldito pronóstico no pudo con Pedro

En 2009 a Javiera le detectaron un lunar canceroso en la parte izquierda de su tórax y luego de varios exámenes, su equipo médico le diagnosticó un melanoma. Se decidió extirpar para erradicar la enfermedad, pues hasta ahí el cáncer estaba sólo en dicho lunar.

Cinco años más tarde y tras estar en constantes chequeos médicos le detectaron nuevamente un melanoma, ahora en una mama.

Tras esta noticia Javiera se conviritó en un ejemplo de valentía y lucha, sobre todo porque a la par que le diagnosticaban su cáncer, recibió la noticia de que esperaba a su primer hijo.

Tras variados exámenes en ese entonces, los doctores sugirieron que no era recomendable la gestación. Sugerencia que ella descartó y terminó con Pedro Milagros Arriagada Suárez como el gran legado de su inmensa batalla contra el cáncer.

El Día de la Madre  fue su última alegría

Un día del año que es muy especial para muchas mujeres en el país y el mundo es el 10 de mayo, fecha simbólica en que las madres del orbe son regaloneadas por sus retoños y algo que Javiera Suárez disfrutó por partida doble con un potente significado que tuvo ese mes en su vida.

"Mayo es el mes aniversario de mi cáncer, dos días después del Día de la Madre me enteré, ya sabía que venía. Un lunes supe que estaba esperando guagua y el viernes siguiente supe que tenía cáncer", contó a La Cuarta la periodista en el marco de la firma de autógrafos de su libro Liveat, la que sería una de sus últimas actividades públicas.

Javiera se explayó sobre la alegría que le había dado la maternidad, apareciendo en la portada del 19 de mayo de nuestro diario, con un mensaje que hoy cobra más sentido.

"Mucha gente admira mi historia, pero hay más historias de gente que no es conocida y que me gustaría que se conocieran. Quisiera hacer un programa con gente que es un ejemplo a seguir", fue el deseo, ahora inconcluso, de la querida Javi

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