Glamorama

Américo y los problemas que tuvo con el alcohol: "Veía un espacio de tiempo, aeropuerto, duty free, en el auto con chofer y yo al lado (tomando). Ya llegaba a la casa medio mareado..."

americo

“Whisky, ron, pisco. Después fui mejorando, vodka, porque el vodka no dejaba olor. Y empiezo a darme cuenta que no estaba bien...", recuerda Américo sobre el periodo en el cual tuvo problemas de adicción al alcohol.

El cantante de 45 años fue invitado al programa de entrevistas Martín Cárcamo, De Tú a Tú. Y esta fue una de las experiencias que relató:

“24 o 25 años, cuando empiezo la cosa social. Después empiezo a tener una cercanía también entre el 2004 al 2006, cuando vivo y estoy Europa. A esas alturas de la vida todavía buscándome, encontrándome.

“Estaba lejos, además en la zona nórdica, Suecia, Noruega, había puro destilado, entonces ahí ya empezar a tener más relación, a conocer un poco más. Y después parte el 2011 hasta el 2014 es cuando se intensifica esto de compartir, la cosa más social, más continúo también.

“Pero me empiezo a dar cuenta que en realidad no me gusta. Esta cosa tan social no era tan social, porque yo me empezaba a apartar, después lo empezaba a hacer solo. Después empecé a tener la típica respuesta ‘es mi plata, yo hago lo que quiero, me lo merezco, siempre me he portado bien’.

“Y eso me empieza a parar las antenas, ‘algo pasa aquí, algo no cuadra aquí’”

Martín Cárcamo: “¿Te viste tomando solo?”

Américo: “Claro. Llegaba una temporada larga de shows, tocatas, parte intenso. Me tocó vivir la evolución de mi carrera súper efervescente, y además con dos trancazos importantes. Un trancazo que fue el terremoto.

“Entonces la evolución natural del artista chileno no la viví yo, que era un gran Viña del Mar y que después de eso se venía todo. No, terremoto y otra vez nadie me ve. Como ‘es mi momento, pero nadie me ve'.

“Y era una temporada larga de shows, de cosas por cumplir. Siempre cumplí. Todo en lo que me comprometí cumplí. Nunca dejé de ir a algo, nunca dejé de hacer algo, nunca fui irresponsable en ese sentido.

“Pero era como hacer, hacer, hacer, y veía un espacio de tiempo, aeropuerto, duty free, en el auto con chofer y yo al lado (tomando). Ya llegaba a la casa medio mareado. Pepa las primeras veces no me decía nada. Todo bien. Compartir, reírse, asados, amigos.

“Era eso, me empecé a dar cuenta que era querer apagar y empecé a perder mucho tiempo. Después empieza a crecer esa sensación de angustia, de culpa, ‘¿qué hice?, ¿por qué lo hice?, ¿para qué lo hice?’.

“Whisky, ron, pisco. Después fui mejorando, vodka, porque el vodka no dejaba olor. Y empiezo a darme cuenta que no estaba bien. Y del 2015 en adelante es cuando gracias a un amigo hago el primer stop. ‘Aquí está pasando algo, esto no está bien. Esto no es para mí’.

“Y empiezo a distanciarme. Y ahí tenía un consumo de beber dos o tres veces al año. Pero a pesar de que era nada, de hecho un año tuve que solo una rasca, no me sentía bien, no estaba bien, no me encontraba.

“Y empecé en una búsqueda de dejar esto, encontrarme, ¿qué me pasaba? Pasé por un tiempo de mucha angustia. No me voy a olvidar jamás. Me da mi primera crisis de pánico, mi primer cuadro ansioso. Llego a la clínica, yo me iba a morir, el corazón me saltaba.

“Era terrible, la primera vez que me pasaba, entonces tenía esta necesidad imperiosa de poder resolver mi vida, de callar esto que me estaba pasando, que estaba sintiendo. De no ser visto, esta sensación tan grande de no ser querido, de no ser capaz. De haber llegado sin tanta dificultad a una serie A artística, y no haberlo logrado.

“Tuve el tiempo suficiente y la posibilidad real de poder cambiar mi vida cuando llega la pandemia. Estar detenido, tener el espacio para la pausa, ese silencio, por más insoportable que fuera estar conmigo mismo, pero vivir esa experiencia”

Más sobre:entrevistaproblemasalcoholadicciónAmérico

Lo último

Cotiza y compara todas las marcas y modelosPublica tu auto acá