Esta semana Kenita Larraín estaba feliz en su círculo íntimo. Ella y su marido, el empresario argentino Sergio Ader, ultimaban los detalles para que la mamá de él viajará desde el país trannsdino para pasar en familia las fiestas de fin de año.

Sin embago, la suegra de María Eugenia Larraín sufrió una repentina crisis de salud y falleció repentinamente, afirma una fuente cercana a la numeróloga e ingeniera comercial.

Por supuesto que Ader y su esposa quedaron en schock con una mala noticia que jamás imaginaron.

Larraín tenía presupuestado, el jueves de esta semana, ser una de las figuras estelares de la alfombra roja de la Gala del Copihue de Oro, emitida por TVN y el canal YouTube de La Cuarta, y una de las presentadoras de premios.

Pero durante la mañana de ese mismo jueves se comunicó con la producción para excusarse y, en tono desolado, explicar la triste razón que obligó a ausentarse del evento.