Los 133 cardenales no lograron consenso en la primera jornada del proceso para elegir al sucesor de Francisco. Aunque esperado, el humo negro refleja el inicio de un proceso marcado por divisiones internas, desafíos globales y una Iglesia que busca dirección. El italiano Parolin y el filipino Tagle suenan como los favoritos.
Finalmente humo negro salió de la Capilla Sixtina, lo que significa que los 133 cardenales no eligieron papa en la primera votación del cónclave.
En la primera elección papal en más de una década, tras la muerte de Francisco, la elección se está llevando a cabo en un escenario marcado por las tensiones internas en la Iglesia, las consecuencias que perduran por sus escándalos financieros y sexuales, además de los desafíos globales por los conflictos que marcan al mundo.
En ese escenario, cabe destacar que el hecho de que haya salido humo negro no es una sorpresa, ya que la primera votación rara vez produce resultados.
Por eso la atención se intensificará durante la próxima jornada, ya que los cardenales retomarán el proceso este el jueves por la mañana.
Las claves del cónclave
La primera jornada del Cónclave comenzó con una procesión solemne a la Capilla Sixtina, luego de una misa matutina, dando pie al proceso de elección que sigue un rígido proceso.
De ahí que los cardenales permanecerán aislados sin teléfono ni internet hasta lograr un candidato que congregue una mayoría de dos tercios.
En ese contexto, se quemarán las papeletas tras dos rondas de votación diarias: el humo indica si hubo acuerdo (blanco) o no (negro).
Todo el proceso continuará hasta que un candidato alcance los votos necesarios.
Aunque no hay un plazo definido, los dos últimos cónclaves se resolvieron en menos de 48 horas.
Tengan en cuenta que la atención que genera este cónclave se intensifica porque muchos de los electores se están viendo por primera vez frente a frente y diversos reportes apuntan a una división entre cardenales progresistas, que siguen la línea del Papa Francisco, y los conservadores, que cuestionan la dirección del último sumo pontífice y quieren volver a una ruta más tradicional. criticando temas como la diversidad sexual.
Aún con lo anterior, los principales candidatos son más progresistas: Pietro Parolin (Italia), secretario de Estado durante el papado de Francisco, y Luis Antonio Tagle (Filipinas), quien podría ser el primer papa asiático.