La matea Kendra Sunderland, de tan solo 19 añitos, la rompió en la web después del video porno que se mandó la semana pasada.Es que la cabrita, aprovechando que estudiaba, grabó escenas de alto calibre en una biblioteca y tuvo cibercacheteo con un galán, al que dejó con la media sonrisa.

Pero los que no están para nada japis son las autoridades de la Universidad de Oregón, en Estados Unidos. Tan brígido se han tomado el tema, que llamaron a declarar a la niñita para que contará la firme sobre la situación. Y eso que se retiró hace un semestre de los estudios.

De ser encontrada culpable, según el reglamento de la universidad de Sunderland, la cabra enfrentaría una pena máxima de un año de prisión y el pago de una fianza de casi cuatro palos verdes. O sea bien carita le saldría la gracia.