Joao Bernardo Vieira, presidente de Guinea-Bissau y más conocido como "Nino", fue asesinado por soldados la madrugada del lunes.

El asesinato ocurrió pocas horas después de que Batiste Tagme na Waje, jefe del Estado Mayor de ese país y principal crítico de la labor de Vieira, también muriera en un ataque perpetrado con granadas contra el cuartel general de las Fuerzas Armadas.

El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon condenó el atentado al igual que el resto de la comunidad internacional. "Estoy entristecido y preocupado", dijo al mismo tiempo que solicitó que se investiguen a fondo ambos asesinatos y se sancione a los culpables.

Vieira fue el autor del primer golpe de Estado en Guinea Bissau en 1980. Diecinueve años despuésfue derrocado por rebeldes y luego volvió al poder en 2005, eso sí con el respaldo de las urnas y el pueblo, como debe ser.

El pequeño país africano, uno de los 10 más pobres del planeta, entra en una situación de máxima incertidumbre tras la muerte de los dos hombres más poderosos.

"Nino" Vieira era un ex electricista nacido en Bissau en abril de 1939, fue general de división y una de las figuras de la "lucha de liberación nacional" librada durante once años contra Portugal, antigua potencia colonial de este pequeño país pobre e inestable de África occidental.