Falta menos de un mes para las Fiestas Patrias y los hígados ya se preparan para el diluvio de alcohol propio de esas celebraciones. Sin embargo, a más de alguno el siguiente estudio podría ser equivalente a la peor caña del mundo.

De acuerdo a la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), el licor sería el gran responsable de la aparición de siete tipos de tumores malignos.

El estudio fue realizado por la Dra. Jennie Connorde la Universidad de Otago, en Nueva Zelanda, y arrojó que hay una relación entre la frecuencia y litros que se echan al buche, a la aparición de cáncer en la boca, garganta, laringe, esófago, hígado, colon, intestino y mama. Según la investigadora, el alcohol causó medio millón de muertes sólo en 2012, un 5.8 por ciento de las muertes por cáncer alrededor del mundo.

Connor fue clarita como el vodka al acusar que existe "gran evidencia de que el alcohol produce cáncer en siete lugares, y probablemente en otros". Además, fue súper aguja al decir que no hay nivel de consumo seguro, porque el que se toma la copita de vino a la cena está igual de expuesto que el mortal que vive arriba de la pelota y tiene la sopaipilla pasada.

Por otro lado, los mitos que indican que beber cerveza o vino con moderación mejorarían la salud del corazón fueron desestimados por la científica, la que asegura que "es irrelevante en comparación con el creciente peligro ante la gama de cáncer".