Después de haber quedado en ridículo, los servicios secretos gringos  investigan  cómo una pareja de socialités burló la seguridad y se coló en la primera cena de Estado que el presi Barack Obama dio en honor del primer ministro indio, Manmohan Singh, en la Casa Blanca.

Michaele y Tareq Salahi, un matrimonio residente en el estado yanqui de Virginia, no figuraban en la  lista de los convocados al vituperio, pero lograron entrar y hacerse  fotografías con los invitados, difundiéndolas inmediatamente  después en su página de Facebook.

La mujer -una aspirante a estrella televisiva- y su  marido se sacaron fotos con el vicepresidente Joe Biden y el  jefe de gabinete de la Casa Blanca, Rahm Emanuel, entre otros.

La emisora CNN hizo ver las imágenes de la llegada de los  invitados, al final de los cuales aparecieron, aunque sin ser  anunciados pues no figuraban en la lista, Michaele y Tareq,  enfundados en vestidos de gala. Él iba de esmoquin y ella llevaba  un sari rojo con bordados dorados.

"Honrados de estar en la cena de Estado de la Casa Blanca en  honor de India, con el presidente Obama y nuestra primera dama",  escribieron en Facebook.

La Casa Blanca confirmó que los Salahi no estaban invitados a la cena, considerada como uno de los grandes eventos sociales  del año en Washington.

El presidente nunca estuvo en peligro pues todos los  asistentes pasaron por un detector de metales, explicaron los servicios de seguridad para sacarse los pillos y anunciaron que ya abrieron una investigación.

"El puesto de control del servicio secreto no siguió los  procedimientos", gritó el vocero del cuerpo de agentes que vigilaba a los dignatarios locales y extranjeros.

La cena de gala ofrecida el pasado martes por  Obama había congregado a cerca de 300 invitados de la flor y nata de la sociedad gringa: Congresistas, personalidades de ascendencia india, el senador John Kerry, el gobernador republicano de Louisiana, Bobby Jindal, así como gente del mundo del espectáculo,  como el cineasta Steven Spielberg.

Los Salahi son conocidos en Virginia por operaciones de promoción del vino y del del polo; por fotografiarse con famosos y aparecer en actos y fiestas en la capital estadounidense.

Ahora podrían ser acusados de allanamiento o de chantear a las autoridades. Y si se confirma que mintieron para entrar, se trata  de un delito federal.

LA PAREJITA: Michaele y Tareq Salahi tienen plata y lo pasan chancho, incluso con los gorilas del servicio secreto.

REDONDITO: El vicepresi, Joe Biden (al diome), abraza a Michaele junto a Tareq.