Nostradamus y Baba Vanga no se conocieron, ni siquiera vivieron en el mismo siglo, sin embargo, coincidieron en una cosa: el 2025 será un año peligroso para Europa.

Nostradamus fue un astrólogo y médico francés del siglo XVI, quien escribió Les Prophéties, un compendio de 942 cuartetas poéticas que supuestamente predicen el futuro. De hecho, se dice que predijo la aparición de Hitler, la llegada del hombre a la luna y el atentado a las Torres Gemelas en 2001, entre otros.

Baba Vanga, en tanto, era una mujer búlgara ciega que vivió entre 1911 y 1996, y quien aseguraba tener visiones del futuro y quien habría predicho la Segunda Guerra Mundial, la muerte de la princesa Diana e incluso da fecha del fin del mundo.

Para el 2025, sus predicciones no son nada favorables para la humanidad. Ambos prevén un conflicto mayor en Europa, el que tendrá graves consecuencias en el mundo entero.

En el siglo XVI Nostradamus escribió que las “tierras de Europa” se verían envueltas en “guerras crueles”, pero “la antigua plaga será peor que los enemigos”. A eso sumó que un conflicto que partiría entre dos países, se extendería rápidamente por el mundo, donde Reino Unido se verá involucrado.

Baba coincidió en que estallará una guerra entre dos países, con ramificaciones que se extenderá por el mundo “devastando” a Europa y diezmando su población.

Las otras predicciones

Pero la guerra no es la única predicción que ambos hicieron. Nostradamus también habló de una crisis económica Global, que bien podría derivar del conflicto bélico en Europa. Según él, habría un colapso en la economía que podría llegar a crear disturbios entre la sociedad. 

Asimismo, el francés también adelantó grandes olas de calor que “no se habrían sentido antes”, especialmente en Europa, y todo debido al cambio climático.

La hambruna se hará presente aún más en países más vulnerables como los de África y desastres naturales que obligarán al desplazamiento de poblaciones enteras.

Baba, por su parte, anunció que los extraterrestres confirmarán su existencia, además del descubrimiento de una nueva fuente de energía. También predijo graves desastres ambientales causados por el cambio climático, como sequías e incendios forestales.

Asimismo, previó avances en órganos humanos cultivados en laboratorio, que podrían aumentar la expectativa de vida y abordar la escasez de trasplantes.

Y en términos políticos, habló explícitamente de la victoria del presidente ruso Vladímir Putin. De hecho, durante una reunión con el escritor Valentin Sidorov en 1979, Vanga habría dicho: “Todo se derretirá como el hielo, sólo uno permanecerá intacto: la gloria de Vladimir Putin, la gloria de Rusia”.