Es común que en incontables ocasiones se retrate el amor y las relaciones de pareja como un vínculo en el que cada uno de los involucrados debe estar dispuesto a renunciar a una parte de sí para poder estar con la otra persona.

También, es habitual que se enlace el enamoramiento con fenómenos como el sacrificio, la entrega total o, incluso, la obsesividad.

Sin embargo, aquello no significa que tales puntos sean positivos.

Más bien, todo lo contrario.

La tendencia hacia ese tipo de ideas no solo puede deteriorar una relación, sino que también impactar negativamente en la salud mental.

Es por esto que distintos especialistas han compartido recomendaciones para contribuir al desarrollo de vínculos afectivos sanos, que potencien el bienestar en vez de ponerlo en riesgo.

Según explicó en un artículo la psicóloga de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Paulina Uribe Morfín, “la importancia de construir relaciones sanas radica en que es necesario recuperar espacios de respeto, ayuda mutua y reconocimiento”.

En este sentido, la también psicóloga y escritora, Celia Antonini, enfatizó a Infobae que “el apego deja de ser saludable cuando empieza la necesidad de controlar al otro: dónde va, dónde está, no dejarlo solo”.

“Lo saludable siempre es el equilibrio. No hay salud mental en el exceso”, recalcó.

A continuación encontrarás una serie de claves para tener vínculos sanos, según distintos expertos.

1. Mantener una comunicación efectiva

Antonini enfatizó que elementos como la transparencia y la honestidad son esenciales para comunicarse efectivamente en una relación.

Para esto, es fundamental que se desarrolle un vínculo de confianza en el que ambos puedan compartir sus sentimientos, expectativas y preocupaciones, sin sentirse juzgados o fuera de un entorno seguro.

De esta manera, a través de la escucha y la expresión de sus emociones, podrán construir herramientas que les permitan aproximarse a lo que siente el otro.

2. Respetarse y valorarse mutuamente

La psicóloga especialista en dependencia emocional y escritora, Paola Bertiz Broll, dijo en declaraciones rescatadas por el citado medio que esto implica aceptar a la otra persona como es, sin tratar de cambiarla y sin pasar a llevar o desafiar sus límites.

“Es clave el proyecto común, (pero) igual de importante es que cada uno tenga su espacio propio y respete el del otro, aceptando su individualidad”.

Bajo esa premisa, el psiquiatra y escritor José Abadi manifestó a Infobae que hay que “desprenderse de los aspectos narcisistas que nos impiden reconocer al otro y pretender que es solamente lo que yo necesito o quiero”.

3. Tener independencia

Pese a que las parejas están conformadas por dos personas, no hay que olvidar que cada una tiene su propia individualidad.

Por eso, es importante que realicen actividades de manera independiente y dediquen tiempo a lo que disfrutan hacer por su propia cuenta.

En palabras de Abadi, “el amor es aceptar al otro y, justamente, la riqueza del amor (de pareja) es que se trata de un otro”.

“Porque somos distintos, nos deseamos y porque nos deseamos, podemos querernos y porque, como nos queremos, podemos construir una relación de amor”, reflexionó.

4. Desarrollar confianza

Este punto está directamente relacionado con el primero y para que pueda florecer, es importante que los actos sean coherentes con lo que promete cada uno de los individuos.

De lo contrario, la relación puede deteriorarse y aumentar la incertidumbre.

Según explicó la psicóloga Adriana Guraieb en declaraciones rescatadas por el citado medio, la confianza “es el termómetro de la implicación y la vinculación que tenemos con los demás”.

5. Apoyarse mutuamente

Acá no solo se hace referencia a apoyar a una de las partes cuando pasa por un momento difícil, sino que también a celebrarla e impulsarla cuando pasa por periodos fructíferos.

Así, se puede fomentar una dinámica de equipo en la que ambos se potencien.

“Eso hace un amor saludable”, destacó Antonini, además de recalcar en la importancia de los puntos anteriores.