El precio más alto en el ultimo año alcanzaron este lunes las acciones de la WWE, elevándose en más de un 10% tras el retiro de Vince McMahon de la compañía y la especulación sobre una eventual venta durante este marco de tiempo.

De acuerdo al analista Alan Gould, “este es un entorno desafiante con las acciones de la mayoría de los compradores lógicos deprimidas, pero hay demanda de programación de eventos en vivo, y es la primera vez que uno podría pensar de manera realista que la WWE podría estar a la venta”.

El portal Deadline recogió esas palabras agregando que entre los compradores podrían encontrarse conglomerados que están abocados al streaming como son los casos de Comcast, Disney, Amazon o, en un caso más improbable, incluso Netflix.

Al mismo tiempo, un hecho no menor ocurrirá en octubre de 2024, ya que en ese momento concluirán contratos televisivos de la WWE en Estados Unidos y se espera que las discusiones de renegociación se lleven a cabo el próximo año. En tanto, el trato con el streaming Peacock está asegurado hasta comienzos de 2026.

Por eso el analista planteó que se espera que el nuevo trato incremente su valor en un 50% respecto a la última negociación que se llevó a cabo en 2019 con las empresas Fox y Comcast.