En algunos casos el vino tinto, y en menor medida el vino blanco, se ha vinculado con mayores beneficios para la salud.
La influencia del alcohol en el microbioma intestinal es un campo de estudio relativamente nuevo y en desarrollo.
Aunque aún hay mucho por descubrir, es evidente que el equilibrio entre las bacterias “buenas” y “malas” en nuestro intestino es crucial para la digestión adecuada, la función inmune y la salud intestinal.
Según un artículo publicado por NYTimes, investigaciones preliminares sugieren que el consumo excesivo de alcohol puede desequilibrar este balance, llevando a una condición conocida como disbiosis.
Esta condición se asocia con una mayor inflamación y enfermedad en comparación con tener un microbioma saludable.
Los problemas del alcohol en el microbioma
El consumo desmedido de alcohol ha mostrado tener varios efectos adversos en el microbioma intestinal.
Por ejemplo, individuos con trastorno por uso de alcohol a menudo presentan disbiosis, junto con una mayor permeabilidad en el revestimiento intestinal.
Esto puede permitir que bacterias y toxinas escapen al torrente sanguíneo y lleguen al hígado, causando inflamación y daño hepático.
Además, investigaciones sugieren que un microbioma intestinal no saludable podría contribuir a los antojos de alcohol.
¿Qué tan bueno es el vino?
Aunque la investigación sobre cómo el consumo moderado de alcohol afecta el microbioma intestinal es limitada, estudios han encontrado que, en comparación con los no bebedores, las personas que consumen alcohol en niveles bajos a moderados tienden a tener microbiomas más diversos, lo cual se asocia generalmente con un intestino saludable.
Específicamente, el consumo de vino tinto, y en menor medida el vino blanco, se ha vinculado con una mayor diversidad microbiana, posiblemente debido a los polifenoles presentes en las pieles de uva.
Sin embargo, estos compuestos también se encuentran en las uvas y otros alimentos y bebidas sin alcohol, sugiriendo que no es necesario consumir alcohol para obtener sus beneficios potenciales.
¿Tomar menos alcohol beneficiará a mis intestinos?
La investigación también ha explorado si reducir el consumo de alcohol puede mejorar la salud del microbioma intestinal.
En personas tratadas por trastorno por uso de alcohol, se ha observado que el microbioma comienza a mostrar signos de recuperación y la permeabilidad intestinal disminuye pocas semanas después de cesar el consumo.
Sin embargo, estos individuos también tienden a adoptar hábitos de vida más saludables en general, lo que podría contribuir a la mejora de la salud intestinal.
En resumen, aunque el consumo excesivo de alcohol claramente tiene efectos negativos en el microbioma intestinal y la salud en general, los efectos del consumo moderado son menos claros y requieren más investigación.
Lo que sí es cierto es que reducir el consumo de alcohol es beneficioso para la salud, especialmente considerando los riesgos conocidos de alcohol para causar reflujo ácido, inflamación del revestimiento del estómago, sangrado gastrointestinal y un aumento en el riesgo de varios tipos de cáncer.
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