En redes sociales se está popularizando una extraña tendencia: videos que mezclan imágenes estilo fin del mundo, incluyendo bombardeos y cielos incendiados, que son acompañados por la emblemática balada “I Don’t Want to Miss a Thing” de Aerosmith, tema principal de la película Armageddon (1998).

Como aquella película era parte de una historia que lidiaba con el fin del mundo, por el inminente impacto de un gigantesco asteroide, varios usuarios de redes sociales la están sacando a colación a raíz del reciente conflicto entre Israel e Irán, al que se terminó sumando Estados Unidos.

Una tendencia apocalíptica

Con la reciente escalada de tensiones entre Israel e Irán, los usuarios jóvenes de TikTok e Instagram han recurrido al humor oscuro para procesar el miedo y la incertidumbre.

Y en ese sentido, los videos que han comenzado a rondar en la red contrastan escenarios catastróficos con la poderosa emotividad de la canción de Aerosmith, generando un efecto dramático y a la vez irónico que subraya el dramatismo que lidia con la sensación de impotencia ante acontecimientos fuera de nuestro control. Y claro, muchos hablan de deudas o oportunidades desperdiciadas.

“Estas lleno de deudas y ves un hongo nuclear creciendo por la ventana”

Tal vez la siguiente semana ahora sí le digo que me gusta:

Este fenómeno reafirma un patrón recurrente: las redes sociales se convierten en escenarios donde el humor, por más sombrío que sea, se utiliza para enfrentar la incertidumbre colectiva.

Y la elección de una balada romántica como la de Aerosmith solo añade una capa de ironía que intensifica el impacto emocional y visual de estos “apocalipsis virales” en donde ni el equipo comandado por Bruce Willis puede salvarnos.

Un hit que fue nominado al Oscar

Lanzada en julio de 1998, la canción interpretada por Aerosmith se convirtió en éxito inmediato al debutar directamente en el número 1 del Billboard Hot 100, donde se mantuvo por cuatro semanas.

De hecho, a la fecha sigue siendo la única canción de la banda que alcanzó el primer lugar en las listas de popularidad.

También alcanzó el número uno en todo el mundo, incluyendo países como Australia, Alemania e Italia, ayudando a elevar la popularidad de Aerosmith con una nueva generación.

Escrita por Diane Warren para la banda sonora de Armageddon, fue nominada al Oscar a la Mejor Canción Original en 1999, aunque perdió frente a “When You Believe” de El Príncipe de Egipto.