Nuevos detalles se dan a conocer sobre las pesquisas realizadas en los celulares del entorno de María Elcira Contreras, adulta mayor de 86 años que desapareció desde el fundo Las Tórtolas, en la comuna de Limache, hace más de siete meses.

Según reveló La Tercera PM, estas diligencias se extendieron por 60 días y contemplaron a 13 personas vinculadas familiarmente a la mujer.

Sobre Maximiliano Hernández, hijo de María Elcira, el informe de la PDI señala que éste describió a su madre como “una mujer independiente y activa, aunque con algunos problemas de memoria y una rodilla derecha que, si bien no le impedía caminar, limitaba su movilidad en terrenos complejos. Hasta la fecha, nunca se había extraviado”.

Es en el mismo informe donde se sostiene que este hijo mantuvo su teléfono apagado durante 37 horas, incluso después de la desaparición de su madre. “Esta situación suscita diversas hipótesis, como un posible cese voluntario del uso de la línea, problemas técnicos en el dispositivo, desconexión de la red celular o la inserción de otra SIMcard. Es esencial un análisis más detallados para entender las causas de esta inactividad de alrededor de 37 horas”, reza el documento policial.

Entre las diligencias que el fiscal del caso mantendría pendiente, estaría el tomar una declaración a Maximiliano, para que explique su decisión de mantener apagado el celu.

Pareja de la nieta

Sobre la investigación a Rodrigo Cortez, pareja de una de las nietas de María Elcira, se dio a conocer parte de su declaración a la PDI: el sujeto también hizo referencia de que la mujer, en ocasiones, “olvidaba ciertas acciones, como guardar objetos”.

Y al igual que Hernández, Cortez mantuvo su teléfono apagado durante un largo rato. “Este lapso inactivo, de aproximadamente 15 horas, resulta especialmente relevante porque coincide con una interrupción similar en la línea telefónica de Maximiliano Hernández, hijo de la víctima, quien también presentó una ausencia de actividad desde el 11 de mayo hasta las 23.26 horas del 12 de mayo”, precisó el informe.

Otra de las personas cuyas líneas fueron pesquisas fue Mónica Kleinert, administradora del fundo. Se trata de la mujer que, ya en julio, abandonó el país para quedarse en Estados Unidos.

“El 12 de mayo, su línea muestra actividad constante en Limache, predominantemente en estaciones base cercanas al Fundo Las Tórtolas. Se registran 42 llamadas en total, incluidas comunicaciones destacadas: dos llamadas a las 20.19 y 20.25 con Roberto Cantillana (contacto y amigo de Maximiliano Hernández) y varias llamadas al portero Jacinto Ayala y al sistema de apertura del portón del fundo. Esta actividad indica un flujo elevado de comunicaciones dentro del lugar hasta las 23.51, reflejando consistencia con lo declarado”, se indicó en el documento.

Pese a la diversas diligencias, el fiscal del caso aclaró que, hasta ahora, no cuenta con antecedentes que le permitan sospechar de la intervención de terceras personas.