Frente a la PDI, el sujeto de 18 años reconoció ser parte de un elaborado y macabro plan que involucraba a otras tres personas. Por dinero, accedió a asesinar.
Fue en abril de 2020 cuando la desaparición de una joven de 20 años alertó a la ciudad de Valdivia.
Se trataba de Helena Bustos Sánchez, quien fue intensamente buscada durante más de tres semanas.
Ya en mayo, la Fiscalía de Los Ríos confirmó la tragedia: el cuerpo de la mujer fue hallado en el río Calle Calle.
La Policía de Investigaciones (PDI) no tardaría en dar a conocer escabrosos detalles: el cadáver presentaba diversas puñaladas atribuibles a terceras personas.
“Las condiciones en que se encontraba el cuerpo no eran las óptimas para que nuestro perito en huellas pudiera obtener las impresiones dactilares y cotejarlas con nuestros registros”, aclaró el comisario Rodrigo Morales, por lo que todo quedaría en manos del SML.

Crimen por encargo
Por su parte, la fiscal Tatiana Esquivel recorrió el sitio del hallazgo junto a la policía para recopilar mayores antecedentes del caso. Diligencia que, a la postre, sería determinante.
Fue una tía de la joven la primera en deslizar algunas pistas. “Había pasado una semana donde ella había salido del lugar donde residía (arrendaba en Valdivia). No se sabía nada, y ella nunca dejaba de tener contacto con su familia o amigos. Ella era súper cariñosa, nunca dejó de estar en contacto”, aclaró.
“Los primeros en confirmar que era Helena fueron los familiares que viven en el mismo sector. Ellos llegaron primero y reconocieron los tatuajes que tenía, dos flores en sus hombros y otro en forma de cruz en la espalda”, agregó.
El 28 de mayo, a una semana de confirmarse el asesinato, la persecutora informó sobre la detención de cuatro sospechosos: dos hombres, sindicados como los autores materiales del crimen, y dos mujeres, como las autoras intelectuales. De paso, dio a conocer que se trataba de un crimen por encargo.
Planificaron el homicidio
En enero de 2022, y luego de una larga investigación, el Tribunal Oral en Lo Penal de Valdivia declaró culpables a las personas imputadas por el homicidio calificado de Helena Bustos.
El veredicto condenatorio fue dictado por el tribunal luego de recibir las pruebas presentadas durante el juicio por el fiscal Jaime Calfil y por los abogados defensores de los acusados, que consistió en las declaraciones de 56 testigos y 17 peritos, además de prueba documental y otros medios de prueba.
El vocero de la Fiscalía Regional de Los Ríos, Eric Aguayo, explicó que se acreditó que los acusados actuaron con cuatro circunstancias calificadoras: bajo promesa remuneratoria, con premeditación, alevosía y ensañamiento.
Además, Aguayo afirmó que “la Fiscalía ha solicitado que a los cuatro se les aplique la máxima pena que contempla nuestro Código Penal, esto es, el presidio perpetuo calificado”.

Según la fiscalía, las acusadas Cecilia Mimica Pino (69) y su hija Maggi Filgueira Mimica (52) contactaron a los acusados Fernando Quevedo Gajardo (20) y Matías Pereira Troncoso (21) con el propósito de encargarles el homicidio de Helena Bustos, ofreciendo el pago de una suma de dinero. Para ello y previamente concertados, se asignaron roles. Las acusadas proporcionaron los medios a los otros dos acusados: arrendaron un vehículo en el que sería trasladada la víctima, eligieron el lugar para darle muerte, entregaron un celular para contactarse y un cuchillo.
El crimen fue perpetrado durante la tarde del 28 de abril, cuando los hombres acusados pasaron a buscar a la víctima y mediante engaño la trasladaron en el vehículo arrendado hasta un sector aislado ubicado en el sector Quitacalzón.
En este lugar concretaron el plan previamente acordado, y actuando sobre seguro, le propinaron con un cuchillo a la víctima 21 puñaladas en distintas partes del cuerpo, causándole la muerte. Luego, la arrastraron y depositaron en el río Calle Calle, lugar donde fue encontrada por un lugareño el 21 de mayo de 2020.

¿Por qué mataron a Helena Bustos?
La indagatoria confirmaría que Helena le arrendaba una pieza a dos mujeres que vivían en la población Norte Grande de Valdivia. Las arrendadoras eran Cecilia y Maggi. Matías Pereira, su “amigo”, le había dado el dato.
Sin embargo, todo se quebró luego de una discusión entre la joven y estas mujeres, quienes la terminaron echando. En el lugar, se comprobaría, el tráfico de drogas era algo habitual. Cecilia Mimica era una conocida microtraficante, mientras que Matías y Fernando (el otro asesino) eran los brazos operativos para llevar a cabo las transacciones ilícitas.
En diálogo con Mega, el subprefecto Morales dio a conocer que “en la investigación nos sorprendimos por cómo (las mujeres imputadas) escogieron el lugar (del asesinato) e incluso concurrieron un día antes”. Peor aún, ya que al momento del ataque “ellas estaban a doscientos metros del sitio con el fin de asegurarse que terminaran con la vida de ella”.
En cuanto a la identificación de los asesinos, el policía reveló que el hallazgo de un rosario en el sitio del suceso terminó siendo clave. El detective —que interrogó como testigo a Matías— recordó una foto que vio mientras verificaba su celular.
El subprefecto, en aquel momento, recordó que “vi la fotografía que nosotros obtuvimos con el rosario puesto, que fue el día anterior a la escena. De forma voluntaria, confesó haber participado como autor material junto a su amigo Fernando”.

Matías fue al funeral
Antes de ser detenido, y cuando ni siquiera existían sospechas sobre su participación en el crimen, Matías se acercó a la familia de Helena y despidió a su “amiga” en el funeral.
“Lo vimos que incluso se acercó a la mamá de Helena para darle el pésame, no lo podemos creer”, comentaron cercanos a el Diario de Valdivia.
Y en redes sociales, le habría dedicado el siguiente texto a Bustos: “Tantos años de amistad, muchísimos, últimamente nos habíamos distanciado, tuvimos altos y bajos, pero siempre supimos reparar nuestra diferencias. Siempre, a pesar de todo, nos ayudábamos en uno al otro y tú sabías que siempre podías contar conmigo, así como yo contigo. Es difícil decir adiós a alguien que es muy importante para mí; eras, eres y siempre serás mi mejor amiga. Te quiero Helena y con el dolor de mi alma te digo adiós y vuela alto chica mañosa”.
Cabe destacar que Matías fue condenado a 18 años de cárcel, mientras que el resto de los imputados deberán pasar 20 años tras las rejas.