El chef José “Kai” Baeza y el médico ecuatoriano Christian González son los dos imputados por el crimen de Francisco Albornoz, joven farmacéutico que fue hallado sin vida en una quebrada de San Fernando, en la Región de O’Higgis.

Según el extranjero, fue Kai quien decidió trasladar el cadáver de la víctima, quien habría perdido la vida en un departamento de Ñuñoa (vivienda de González). Y su acusación tiene sentido, ya que la zona era conocida por el “cocinero”.

Cabe recordar que la aprehensión del chef se concretó en su residencia, en la comuna de Colchagua (también ubicada en la Región de O’Higgins). Además, según el testimonio de González, él sólo siguió órdenes para llegar al inhóspito lugar donde decidieron ocultar el cuerpo.

Habla tío del chef

En un recorrido por la zona, el matinal Contigo en la mañana logró dar con un tío de José Baeza (hermano de una abuela fallecida). Si bien el hombre aceptó hablar con el programa, lo hizo desde el completo anonimato.

“Era agrandado. Yo años que no conversaba con él. Se creía grande. En Facebook siempre decía que andaba en Dubai, que iba a comprar una tele en Santiago de cien millones de pesos; todo era agrandado”, dijo el adulto mayor.

“A su mamá creo que no la quería, porque él hacía lo que quería en su casa, se portaba mal, todo lo que hacía en su casa, lo hacía con mala intención”, añadió.

Finalmente, contó que “con la abuela este cabro se portó muy mal. Ella falleció. Yo le decía ‘oye, ¿cómo está mi hermana?’. Y el último día, cuando yo estaba tomando té, me dijo ‘oye tío, tu hermana falleció’, y hacía así con el dedo (movimiento horizontal con el índice en el cuello). Mi hermana todavía estaba tibia y la echaron al cajón. Y la echaron con el puro pijama y no sé dónde la botaron. Él hizo todos los trámites”.