Los 11 goles que lleva el 2013, su papel protagónico en el bicampeonato de Juventus en la Serie A y su gran momento en la selección chilena, convirtieron a Arturo Vidal en el pernil más suculento del peloteo mundial.

Al menos eso es lo que cree el mánager general de la Juve, Beppe Marotta, que aseguró que "Arturo Vidal vale lo mismo que Gareth Bale, 100 millones de dólares".

Quizás la apreciación del mandamás de la Vecchia Signora viene de muy cerca, pero la verdad es que al menos en la bota, Vidal es el verdadero Rey Arturo.

Claro, porque el hombrón del mohicano más cotizado del Calcio subió sus bonos a 46 palos verdes y se convirtió en el jugador más caro de la prestigiosa liga italiana.

Sólo le hacen collera el eslovaco Marek Hamsik, que tiene una etiqueta de 45 millones de dólares; el argentino Gonzalo Higuaín que le costó 44 palos al Napoli; y Claudio Marchisio, yunta del Celia en la Juve, que cuesta 41 millones de la moneda gringa.

Como el precio de Arturito Vidal es de los más top y sube más que la espuma de la chela, los capos de Juventus están haciendo malabares pa' extender el vínculo con Celia Punk por cuatro temporadas más y así asegurar la presencia de Vidal hasta el 2018 en la Juve.

Es que los tanos no quieren que ningún buitre les quite al ex colocolino, a quien consideran el mejor jugador del equipo y por eso no lo soltarán ni siquiera por un container lleno de billetes o un minuto feliz de las cafeteras de Soltera Otra Vez.

"Arturo Vidal no está a la venta, ya que constituye el núcleo duro del equipo", disparó Marotta, que sopló pa' callao que el Real Madrid dejó la vida en la cancha pa' quedarse con la garra, el talento y los goles del hijo ilustre de San Joaquín.