El dominicano Bill Clinton Disla Herrera le quitó el celular a una peluquera. Lleva 6 años en el país y ya es conocido por los policías.
William Jefferson Clinton era más conocido como Bill Clinton y durante su mandato como presidente de EE.UU., entre 1993 y 2001, tuvo problemas con la ley por la polémica que protagonizó con la practicante Monica Lewinsky, quien tuvo un encuentro sexual de carácter oral con el demócrata. Bill lo negó hasta que las evidencias lo delataron y estuvo a punto, a punto de irse del cargo.
El asunto es que unos dominicanos por entonces eran admiradores del marido de Hillary Clinton, y apenas supieron que el hijo que esperaban era varón decidieron bautizarlo con el nombre del político, ¡pero también con el apellido como segundo nombre!
Así, Bill Clinton Disla Herrera fue inscrito en los registros de identidad de la isla caribeña, hace 25 años, pero hasta ahora su vida está lejos de la que siguió el ídolo de sus padres: no se dedicó a la política, sino que sus pasos han estado alejados de la ley. El joven en busca de aventuras y víctimas se vino a Chile el 2012, y se instaló en Arica.
Desgraciadamente para Bill, nuestras policías son más pillas que él, porque en mayo la SIP de Carabineros lo agarró mientras andaba rondando en la población Cerro Chuño: tenía una orden de detención pendiente, de fecha 20 de abril del 2018 del Juzgado de Arica, por el delito de robo en lugar habitado.
Bill Clinton salió libre y volvió a caer preso, pero esta vez los captores del delincuente importado fueron los detectives de la Brigada Investigadora de Robos la PDI.
La policía civil recibió una denuncia a mediados de junio por el delito de robo con violencia. "La investigación y el análisis de la información aportada por la Oficina de Análisis de la Prefectura
Provincial Arica permitieron la identificación y ubicación de un extranjero de nacionalidad dominicana, de nombre Bill Clinton, como autor directo en el ilícito denunciado, quien resultó ser un conocido delincuente del sector Cerro Chuño", dice el parte.
La peluquera contó que estaba en su negocio cuando el imputado entró y le quitó el celular que tenía en sus manos para luego salir corriendo y subir a un auto en el cual se echó el pollo.
Las cámaras de seguridad de la peluquería registraron el asalto y, junto al relato de la mujer, permitieron que la fiscalía tuviera la certeza sobre la identidad del ladrón, para luego emanar una orden de detención en su contra.
En la casa del Bill la PDI encontró un gorro que usó durante el asalto para tapar su rostro, el auto en que arrancó y 66,58 gramos de marihuana a granel.
Ayer fue formalizado y quedó preso.
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