"El Pozolero" convirtió en sopita de soda cáustica a 300 rivales narcos

A una semana de que el ejército mexicano arrestara al multihomicida Santiago Meza López, alias "El Pozolero", quien cocinó en ácido a por lo menos 300 rivales, se siguen conociendo escalofriantes detalles de sus atrocidades.
"El Pozolero" o "El Chago" trabajaba para el famoso narcotraficante Teodoro García y su pega era hacer desaparecer en ácido corrosivo a deudores y enemigos de su patrón, todos víctimas de la mezcla de drogas y corrupción.
Luego de ser detenido en una autopista de Tijuana, el sicario reconoció haber cocinado en su finca por lo menos 300 cuerpos humanos en 2008, producto de la guerra del narcotráfico que existe en la frontera con Estados Unidos.
Explicó que le entregaban los cadáveres, únicamente de hombres, y que después de disolverlos y macerarlos en soda cáustica -ácido que sirve para limpiar cocinas y fabricar jabón- tiraba el "caldo" en pozos (foto de arriba).
La receta que Santiago Meza usaba para desintegrar los cuerpos consistía en llenar la mitad de tambores con 200 litros de agua, echarles dos sacos de soda cáustica y ponerlos al fuego. Después que les daba un hervor tiraba los restos humanos y los dejaba cocinando por 8 horas, hasta que quedaba una sopa con los dientes y las uñas.
Debido a los químicos que usaba para disolver los cuerpos y los gases que soltaba el caldo, dijo que se protegía con guantes de látex y máscaras especiales.
Meza contó que después de que dejaba enfriar el caldo lo vaciaba en tambores de plástico que se llevaba a basurales. En los vertederos finalmente tiraba la sopa y le prendía fuego con gasolina a lo que quedaba.
El pozole es un guiso de maíz, carne y ají con mucho caldo, y como Santiago Meza era conocido en los ambientes del hampa mexicano por cocinar a los narcotraficantes rivales, le pusieron el apodo de "El Pozolero".
MISERIA
Meza López dijo que aprendió a hacer pozole con una pierna de vaca que un día disolvió con un proceso similar. Aclaró que nunca realizó ese proceso con una persona viva ni descuartizó algún cuerpo.
"Los personajes que me daban para desaparecer me los entregaban muertos, porque sólo aceptaba ingredientes masculinos, y los metía completos a los tambores... Les vaciaba 40 o 50 kilos de polvo que compraba en una ferretería y luego los restos los vaciaba en unas fosas...", dijo.
"El Pozolero" agregó que cobraba 600 dólares a la semana (como 370 lucas chilenas) por la macabra tarea de la que dijo estar arrepentido y por la que pidió perdón a los familiares de los 300 finados que convirtió en caldo.
En los interrogatorios, Santiago Meza López , de 45 años, dijo que hace 9 empezó a trabajar como pozolero con el narco Marco García Simental, hermano mayor de su último patrón, el también traficante Teodoro García, y confirmó que aprendió a hacer pozole con una pierna de vaca. "La puse en una cubeta, le eché un liquido y se deshizo", explicó a sus captores.
"El Pozolero" era uno de los 20 narcotraficantes más buscados por el FBI de Estados Unidos y confirmó que los 300 pericos que desintegró en ácido eran deudores o enemigos de su jefe, Teodoro García.
La última vez que cocinó a un narcotraficante en soda cáustica fue dos semanas antes de que fuera capturado. "Fue hace 15 días (a comienzos de año) por orden de 'El Teo'", declaró en los interrogatorios.
POBREZA
Santiago Meza López fue criado en Guamúchil, al noroeste de México. Las pellejerías económicas de su familia lo obligaron a dejar el colegio en sexto básico y aprender el oficio de ladrillero y posteriormente de albañil.
"El Pozolero" tiene 8 hermanos, uno de ellos Melchor, quien hace un año sufrió un accidente que lo dejó inválido.
El menor de los hermanos Meza recordó a su hermano como un hombre trabajador, "que siempre se preocupó por sacar adelante el gasto de la casa y ayudaba a nuestro padre, Salvador Meza, en el oficio familiar".
La familia Meza López se dedica desde hace medio siglo a la elaboración de ladrillos y a la albañilería.
La mami de Santiago Meza López también guarda buenos recuerdos de su regalón.
"Mi hijo es un muchacho buena persona y trabajador. Siempre le ayudó a su padre a hacer ladrillos. No lo digo porque sea mi hijo, pero toda la gente de aquí lo apreciaba, porque era muy tranquilo", dijo Rita López a los periodistas méxicanos.
ASISTENTE DEL CHEF TAMBIÉN CAYÓ REDONDO
"El Pozolero" fue detenido junto con otros 2 sicarios que también dijeron trabajar para el narcotraficante Teodoro García.
Fue una llamada anónima la que alertó al Grupo Anfibio del Ejército Mexicano de la presencia de hombres armados en una playa, en las afueras de Tijuana, Baja California.
Santiago Meza, Héctor Valenzuela, quien dijo ser "cocinero personal" de Teodoro García, y Fernando López, asistente de chef, cayeron en un complejo turístico ubicado a unos 80 kilómetros de la frontera con Estados Unidos. Cargaban ametralladoras, fusiles, chalecos antibalas, cargadores, cartuchos y granadas de mano.
El caso de "El Pozolero" no es nada raro en México, ya que en el Estado de Chihuahua en un sólo día fueron asesinadas 22 personas, a las que hay que sumar otras 18 en el resto de ese país.
Entre las víctimas del narcotráfico no sólo figuran sicarios de los poderosos capos de las mafias mexicanas, sino también empresarios y un ex alto oficial de la policía de Oaxaca, que viajaba junto a su hijo en auto deportivo.
Imperdibles
Lo último
hace 1 min
hace 27 min
hace 39 min
hace 45 min
09:51











